“La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, aprobada en septiembre de 2015 por la Asamblea General de Naciones Unidas, establece como visión para el desarrollo mundial en el largo plazo, una transformación encaminada a la sostenibilidad económica, social y ambiental.

Frente a la adopción de los objetivos mundiales, Ecuador asumió el compromiso con el Plan Nacional de Desarrollo 2017-2021 “Toda una Vida”, aprobado el 22 de septiembre de 2017.

Fue la base trazada por el Gobierno para cumplir con sus objetivos y metas; así como para ejecutar las intervenciones públicas orientadas y alineadas a la Agenda 2030.

La respuesta del Estado para poner fin a la pobreza en todas sus formas se fundamenta en el Plan Toda una Vida, que tiene misiones encaminadas a garantizar los derechos durante todo el ciclo de vida y reducir la pobreza extrema.

Las misiones están enfocadas en cumplir, principalmente, con el Objetivo 1, de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y del Plan Nacional de Desarrollo, que buscan “poner fin a la pobreza en todas sus formas, en todo el mundo” y “garantizar una vida digna con iguales oportunidades para todas las personas”.

Una de esas misiones es Casa para Todos, cuyo objetivo es garantizar a las personas con menos recursos y en situación de pobreza el acceso a una vivienda digna.

“Esta Misión es el centro del Plan Toda una Vida porque reconocemos que la causa del problema de déficit de vivienda, es casi siempre, la pobreza y la exclusión”, afirmó Rocío de Moreno, presidenta del Comité Interinstitucional del Plan Toda una Vida, durante su conferencia en el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza.

Detalló que uno de sus principales componentes es la construcción de comunidad, que busca un trabajo en conjunto con los habitantes de los nuevos proyectos habitacionales, para fortalecer comunidades solidarias, inclusivas, libres de violencia y emprendedoras.

“Esta estrategia, como un abordaje de articulación intersectorial dentro de las urbanizaciones, es una hoja de ruta para aportar a la disminución de la pobreza”, detalló Rocío de Moreno.

Además dijo que “la vivienda propia tiene un efecto protector, cuando alivia el estrés económico y la inseguridad, pero la construcción participativa de comunidad los empodera para que rompan el ciclo de la pobreza”. 

El Gobierno trabaja en el fomento al emprendimiento, la inversión y la producción, a través de intervenciones enmarcadas en el Plan “Toda una Vida” como: la Gran Minga Nacional Agropecuaria; el acceso a créditos; la Agenda de Reactivación Económica; la Ley de Fomento Productivo y el Acuerdo Nacional por el Empleo.

El pasado 16 de julio de 2018, la Secretaría Nacional de Planificación presentó ante el Foro Político de Alto Nivel sobre el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas su primer “Examen Nacional Voluntario”, como parte del compromiso en la implementación de la Agenda 2030.

En el informe se destacan los esfuerzos para combatir la pobreza y promocionar el crecimiento económico sostenido. En 2017, la pobreza extrema se ubicó en 7,9%, 0,8 puntos menos que en 2016 (8,7%).

En ese mismo año, la tasa de pobreza multidimensional, que mide las carencias en educación, trabajo y seguridad social, salud, agua y alimentación, hábitat, vivienda y ambiente sano, se redujo a 34,6%, es decir 2,8 puntos menos que en 2014 (37,4%).

En relación con la protección y sustentabilidad ambiental en 2017 la conservación de superficies de cuencas hidrográficas era de 32,6%, lo que significa 1,5 puntos más que lo registrado en 2014 (31,1%).

Esto se logró con la puesta en marcha de programas enfocados en la conservación de bosques y el desarrollo productivo, mediante la promoción de bioemprendimientos como: Reverdecer Ecuador; Programa Integral Amazónico, la Estrategia Nacional de Biodiversidad 2015-2030, entre otros. (I)