Especialistas salvaron la vida de un niño de dos días de nacido
Un infante de dos días de nacido fue operado exitosamente de una hernia diafragmática de Bochdalek, una rara anomalía congénita y mortal, en Guayaquil.
“Benjamín nació con su contenido abdominal en el área del tórax, lo que impidió el crecimiento de sus pulmones. De no optar por la operación, su fallecimiento era inminente”, expresó Enrique Landívar, médico cirujano neonatólogo del Hospital General del Norte “Los Ceibos”.
Katherine M., madre del neonato, explicó que fue su suegra quien notó que el menor “se ahogaba” y al poco tiempo presentó fiebre y vómito. Fue en ese momento en que el papá del menor lo llevó hasta esa casa de salud del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.
Luego de una serie de exámenes, el equipo multidisciplinario conformado por perinatólogo, imagenólogo, intensivista neonatal, cirujano pediatra y neonatal, anestesiólogo pediatra, instrumentista pediátrico, enfermera neonatal y terapista respiratorio, operó a Benjamín, intervención que duró 4 horas.
Tras la intervención, el menor mostró signos de recuperación inmediatos. Para garantizar una evolución favorable, Benjamín, permaneció 7 días en Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN). Ahora goza de salud, señalan sus padres.
Especialistas de esta casa de salud señalaron que por ser de origen genético, una anomalía de nacimiento no se puede prevenir.
Sin embargo, puede ser detectada en un control prenatal por lo que recomiendan realizar controles periódicos durante el embarazo en centros de salud que cuenten con especialistas en Ginecología, Neonatología, Perinatología e Imagenología.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año, 303.000 recién nacidos mueren durante sus primeras cuatro semanas de vida, debido a anomalías congénitas.