En Ecuador el agua ha servido también como fuente de inspiración para bautizar a personas con nombres relacionados con este recurso, y Yaku, en quichua, es el más popular, según informó hoy el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC).

En el Día Mundial del Agua, instaurado por la Asamblea de Naciones Unidas desde 1953, el INEC homenajeó hoy al recurso con una serie estadística que, entre otras cosas, recoge datos de su lista de "Visualización de nombres y apellidos".

El informe precisa que en 2014 se registró una única inscripción con el nombre Agua en la provincia andina de Imbabura, según la estadística que el INEC recoge desde 1993.

Pero añade que Yaku (Agua, en quichua) lo llevan 44 personas, la mayor parte de ellos en la provincia amazónica de Pastaza, donde habitan algunas nacionalidades indígenas de las etnias Kichwa, Shuar y Achuar.

Entre los datos curiosos de nombres relacionados con el agua, señala que en la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito, se han registrado 15 personas con el nombre Lluvia, en Imbabura una como Lago y 1.268 con Nube en la andina de Cañar.

También hay 2.992 nombres Rocío y 26 Mar en la costera de Guayas y 10 Sirena en la vecina de Los Ríos; así como dos primeros nombres Arroyo en Esmeraldas (noroeste) y 23 Marimar en la amazónica de Morona Santiago (sureste).

La serie estadística precisa que en 2017 el 82 por ciento de los hogares ecuatorianos tuvo acceso al suministro de agua por red pública, aunque en el área rural el acceso fue de sólo 50,7 por ciento.

Asimismo, el 70,1 por ciento de la población tiene acceso a un suministro seguro de agua para beber, que supone su origen de una fuente por tubería, pozo o manantial protegido, o embotellada, disponible cerca de la vivienda y libre de contaminación.

El INEC, por otra parte, calcula en 0,50 centavos de dólar el coste unitario promedio de un metro cúbico de agua potable entregado a nivel de domicilio y precisa que 3.046.353 hogares en el país cierran las llaves de agua mientras lavan los platos o toman una ducha, como principal práctica de ahorro.

La Carta Magna de Ecuador dice: "El derecho humano al agua es fundamental e irrenunciable. El agua constituye patrimonio nacional estratégico de uso público, inalienable, imprescriptible, inembargable y esencial para la vida". (I)