El uso de cuatro especies de plantas para los nacimientos está prohibido
Desde hace seis años, el Ministerio del Ambiente (MAE) desarrolla la campaña ‘No arranques la piel de los árboles’ para evitar el uso excesivo del musgo natural con fines decorativos en los pesebres navideños.
Tarsicio Granizo, titular del MAE, recordó que el musgo juega un papel importante en el ecosistema, sobre todo del bosque nublado, pues absorbe el agua (como esponja) y es el hábitat de organismos, animales y vegetales.
También pidió no cortar el huaycundo o bromelia, los líquenes y helechos, ya que son el hogar de algunas clases de ranas e insectos.
“Proponemos que las personan armen sus pesebres con materiales alternativos, como aserrín, hojas secas, cascarilla de arroz y otros más”, indicó.
Las alternativas
En los pocos locales que se comercializan artículos navideños, en Quito, se observan fundas con musgo procesado y autorizado por el MAE (consta en las etiquetas).
Este material es tratado, es decir, tiene una vida útil mayor y no es necesario adquirirlo cada año. El costo de una envoltura está entre $ 1,50 y $ 2.
“Por la técnica que emplean las personas que lo elaboran no se seca como el natural y sirve para muchas decoraciones”, comentó Graciela Sánchez, comerciante de la Feria Navideña, instalada en el parque La Carolina, en el norte de la capital.
Ella aclaró que desde algunos años está prohibida la venta de musgo por el perjuicio que representa para el ambiente.
También se importa musgo desde Colombia, cuyo valor promedio es de $ 3.
Además de musgos artificiales, hay sustitutos de este material, como césped sintético, alfombras plásticas verdes y el papel pesebre. Este último es el más económico y es comercializado por metros. El costo promedio de un metro cuadrado es de $ 0,80.
“Me parece muy chévere este tipo de material, porque es económico y no representa un impacto negativo en el ambiente”, expresó Martha Riofrío, quien acudió en busca de este producto para armar su pesebre.
Controles de la Policía
La Unidad de Policía del Medio Ambiente (UPMA) inició ayer -a nivel nacional- los operativos para el control de la venta ilegal de musgo y bromelias.
El primer paso de la vigilancia consistió en identificar los lugares donde se comercializa este elemento.
Las provincias con mayor índice de decomiso son Pichincha, Imbabura y Cotopaxi. “El problema del musgo es básicamente en la Sierra, donde existen bosques nublados”, acotó Granizo.
El año pasado la UPMA decomisó 2.096 kilos de la planta y en 2015 fueron 1.800 k. En el caso de las bromelias se incautaron 67 kilos en 2016 y 12 k en 2015.
José Yánez, comandante de la UPMA, aseguró que en diciembre pasado se incrementaron los operativos conjuntos y por eso el volumen de lo incautado fue superior. Él espera que haya conciencia de la ciudadanía y evite adquirir el material para instalar los pesebres. (I)