La oms insta a las personas a reducir el sobrepeso y alimentarse mejor para contrarrestar la dolencia
El tratamiento de la diabetes le cuesta a Gran Bretaña $ 15.000 millones al año
El número de personas con diabetes en Gran Bretaña aumentó el 60% en la última década y ya son 3,3 millones aquellos afectados por esa enfermedad, de acuerdo a un informe del grupo benéfico Diabetes UK. El organismo con sede en Londres destacó que en 2005 había en el país 2,1 millones de personas con diabetes, y advirtió que la cifra seguirá aumentando exponencialmente en los próximos años en caso de que el gobierno no tome medidas necesarias para frenar el problema.
Diabetes UK instó al Servicio Nacional de Salud británico (NHS) a mejorar la atención a los pacientes con esa enfermedad y redoblar esfuerzos y financiación para prevenir una crisis sanitaria. La diabetes es una afección crónica que se desencadena cuando el organismo pierde su capacidad de producir suficiente insulina o de utilizarla con eficacia.
La insulina es una hormona que se fabrica en el páncreas y que permite que la glucosa de los alimentos pase a las células del organismo, en donde se convierte en energía para que funcionen los músculos y los tejidos. Como resultado, una persona con diabetes no absorbe la glucosa adecuadamente, de modo que ésta queda circulando en la sangre (hiperglucemia) y dañando los tejidos con el paso del tiempo.
De acuerdo a Diabetes UK, cerca del 90% de todos los casos en el Reino Unido son diabetes tipo 2 (también llamada no insulinodependiente o de inicio en la edad adulta), que está directamente vinculada con una mala alimentación, la obesidad, falta de actividad física, y antecedentes familiares de diabetes. La diabetes tipo 1, que suele ser diagnosticada en la infancia, impide que la persona produzca insulina para controlar los niveles de azúcar en la sangre.
La doctora Joan St John, que trabaja en la clínica londinense de Brent, dijo que la enfermedad se ha vuelto “peligrosamente generalizada” en el país. Brent es una de las zonas con mayores niveles de diabetes de Gran Bretaña. “Cada semana que pasa estamos diagnosticando más pacientes con diabetes, a veces son al menos 3. En el pasado diagnosticábamos una persona por mes”, subrayó.
Las complicaciones de una diabetes no controlada pueden ser muy graves, incluidos daños de nervios, ceguera, daños de órganos y hasta la muerte. Dicha enfermedad, que está mermando los recursos financieros del NHS, es causante de al menos 135 amputaciones de pierna por semana en el Reino Unido.
“Desafortunadamente, el mito de que esta es una enfermedad no seria sigue persistiendo en algunas personas, y por eso ha llegado la hora de erradicar ese mito”, indicó St John. “Una de las complicaciones más serias es la neuropatía (daño de nervios), que puede provocar dolores severos en las piernas y pies, y que hasta ahora no tiene cura”.
La diabetes aumenta además el riesgo de cardiopatía y accidente vascular cerebral (AVC) y es una las principales causas de insuficiencia renal. En los pacientes con diabetes el riesgo de muerte es al menos 2 veces mayor que en las personas sin diabetes. La semana pasada el gobierno británico confirmó que los medicamentos para la diabetes representan el 10% de todas las drogas recetadas por el NHS.
El organismo público destinó 869 millones de libras esterlinas ($ 1.358 millones) en esas drogas, incluidas insulina y metforminas. Hace una década el NHS gastaba unos $ 803 millones en esos medicamentos.
En Gran Bretaña, parte del salario que perciben los médicos está vinculado al número de diagnósticos y tratamientos por diabetes, una práctica que perdura desde hace años y que según el gobierno tiene efecto al combatir la dolencia.
Barbara Young, directora ejecutiva de Diabetes UK, dijo que el gobierno de David Cameron debe hacer más para prevenir nuevos casos y mejorar el tratamiento en aquellos afectados por la enfermedad. “La diabetes ya le cuesta al NHS cerca de $ 15.600 millones al año, y el 80% de este total es destinado a controlar complicaciones evitables. Hay un enorme potencial para ahorrar dinero y reducir la presión a los hospitales y clínicas del NHS a partir de mejores tratamientos que prevengan la diabetes”, continuó.
En ese sentido, el doctor Martin McShane, director del NHS en Inglaterra para enfermedades crónicas, sostuvo que las cifras “son una llamada de atención seria”, además de revelar los crecientes costos que genera la diabetes al servicio de salud público. “Lo dijimos en el pasado y lo seguiremos diciendo, es hora de ponerse serios para cambiar de estilo de vida”, concluyó.
De acuerdo a la OMS, en el mundo hay más de 347 millones de personas con diabetes. Dicha entidad calcula que en 2012 fallecieron 1,5 millones de personas como consecuencias del exceso de azúcar en la sangre en ayunas y agregó que más del 80% de las muertes por diabetes se registran en países de ingresos bajos y medios.
Según proyecciones de la OMS, la diabetes será la séptima causa de mortalidad en 2030. (I)