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El ministerio de educación determinó que las clases en el centro se suspendan de forma temporal
El Montúfar será evaluado integralmente
En septiembre de 2015 comenzó una auditoría al Colegio Nacional Juan Pío Montúfar de Quito. Esto se efectuó como parte de las actividades regulares del Ministerio de Educación, con el fin de establecer un plan de mejoras para la institución que había bajado su rendimiento académico.
Los resultados de esta auditoría evidenciaron, entre otros temas, que había un exceso de 16 docentes en el establecimiento, por lo que se tomó la decisión de reasignarlos, considerando las necesidades del sistema educativo fiscal.
La asignación docente del MinEduc ha respondido a intereses de la enseñanza, para superar el déficit en determinados planteles. Fue así que se procedió a realizar la reubicación de los 16 profesores del Montúfar, que nunca fueron despedidos.
En un supuesto apoyo a los maestros, varios estudiantes del Montúfar cerraron entre el lunes y ayer la avenida Napo y ante la presencia policial agredieron a los uniformados con piedras y palos. Algunos de los adolescentes no vestían uniforme. “Lucían bastante mayores para ser estudiantes”, puntualizó el Ministro del ramo, Augusto Espinosa, quien el lunes acudió a las instalaciones de la institución, donde previo a su ingreso fue perseguido por los estudiantes y estuvo a punto de ser agredido en la gresca, en la que una piedra alcanzó a su edecán, lo que generó su rechazo a la forma de protestar. “Lo que sucedió evidencia la forma como se está educando en este plantel, que fue auditado porque su rendimiento en pruebas como Ser Bachiller no ha sido del mejor”.
El Ministro puntualizó que gran parte de los docentes que trabajaban en el colegio Montúfar fueron asignados a otros establecimientos educativos porque no superaron los 500 puntos sobre 1.000 en las pruebas que toma el Ineval. Espinosa dijo que se investigará a fondo los hechos ocurridos en las afueras del colegio. “Si alguien está en desacuerdo existen los canales adecuados para hacer los reclamos y no usar la violencia como se evidenció”. Agregó que se efectuará una evaluación integral tanto de la parte académica como la administrativa de este plantel que alberga a 4.600 alumnos en dos jornadas.
“Nos han contado que en el interior del plantel existen bandos de profesores que utilizan a los alumnos a su antojo y eso queremos terminar. Solo se quedarán los docentes que merezcan hacerlo”.
En cuanto a la sanción para los 4 alumnos dijo que esta puede ir desde un llamado de atención hasta la separación del colegio. “Hubo gente que estuvo detrás de los estudiantes y los manipuló”.
Este Diario intentó comunicarse con el rector delegado, Segundo Viveros, pero su celular estuvo apagado. Desde el Ministerio de Educación se ratificó que esta semana se posesiona la nueva rectora Ximena Salgado.
Nueva jornada de protestas
Desde las 11:00 de ayer, tras la reunión que tuvo el viceministro de Educación, Wilson Ortega, con las autoridades del plantel, los estudiantes del Montúfar volvieron a bloquear el tránsito en la Av. Napo. Esta vez abrieron una soldadura en la puerta principal, que fue colocada la noche anterior. Además abandonaron las aulas para desplazarse a la calle.
Nuevamente las piedras, ladrillos y ramas comenzaron a invadir la vía. Los alumnos dañaron la acera contigua al centro educativo para aprovisionarse de más piedras. Fueron cerca de 500 los estudiantes, la mayoría de ellos agresivos y cubiertos sus rostros con pasamontañas y atuendos que impedían reconocerlos. Los uniformados utilizaron un camión como medida de defensa inicial. Pero conforme avanzaron los minutos, la gresca en el sector de la Napo, al sur de Quito, se hizo más violenta e incluso se registraron heridos: un policía y un supuesto estudiante que participaba de la manifestación.
Pasadas las 14:00, alrededor de 50 policías ingresaron al establecimiento educativo para sacar a los alumnos que se encontraban en el interior. Desde afuera los reclamos de los padres de familia no cesaron. Tras algunos minutos, los uniformados salieron con 6 estudiantes detenidos. Ellos fueron identificados porque portaban piedras y otros objetos usados como armas. (I)
Los jóvenes también pagarán $ 400
4 alumnos harán labor social durante 3 meses
Los 4 jóvenes, retenidos durante las manifestaciones en las afueras del Colegio Montúfar el pasado lunes, tendrán que cumplir medidas socio-educativas. Los muchachos deben realizar actividades de función social 2 veces a la semana, durante 3 meses.
Esa fue la disposición del juez Freddy Figueroa, durante la audiencia de calificación de flagrancia, que se desarrolló una hora y media después de lo previsto. La convocatoria de la diligencia fue a las 09:30. El proceso legal se siguió por el presunto delito de ataque o resistencia. La audiencia se realizó en forma reservada por tratarse de menores de edad.
Un grupo de estudiantes de ese plantel llegó con carteles para solicitar la liberación de los adolescentes aislados. Los jóvenes agredieron con palos y piedras a los policías.
Ciro Guzmán, representante legal de los menores, reiteró que la acción penal no se inició puesto que se determinó la inocencia de los muchachos. Los alumnos tendrían que presentarse ante alguna Unidad de Policía Comunitaria para realizar diferentes actividades. “Ellos aceptaron hacer estas 2 horas de medidas socioeducativas, porque es una forma de establecer una solución al problema”, dijo el abogado.
La disposición será para los estudiantes Eduardo L.M. (17 años), Kevin Alejandro R. T., Leo Roberto T.E. y Joel B.C., de 15 años, quienes llegaron al edificio bajo resguardo policial. Además de estas labores, deberán pagar $ 400 ($ 100 cada uno) por los daños producidos durante las manifestaciones, en los exteriores del plantel. (I)