Olga Brito, Miguel Alvarado, Laura Chávez, Alicia Parrales y Esteban Sarango cumplieron tres años como bailarines del grupo de danza Nayarak, palabra kichwa que en español significa ‘el que tiene deseos’.

Ellos son parte de la segunda agrupación de baile integrada por personas con discapacidad visual. Al colectivo se suma Jairo Arroyo, de 30 años. 

Miguel, de 53 años, cuenta que se conocieron en un curso de computación en el Servicio Ecuatoriano de Capacitación Profesional (Secap). Allí, por casualidad, bailaron en la clausura de la capacitación. Luego la iniciativa saltó a los escenarios.

El colectivo, hace tres años, diseña sus trajes y practica coreografías complicadas.

El próximo 9 de junio conmemorarán su aniversario con una presentación en la Escuela de Ciegos 4 de Enero de Guayaquil (calles Machala y Bolivia).

Para Laura, de 40 años, el grupo le ha permitido ser independiente. Antes solo viajaba en taxi, pero ahora se moviliza en Metrovía con la ayuda de su bastón. “A mi familia le cuesta aceptar que no veo, pero a diario le demuestro que la discapacidad no me impide seguir con mi vida, eso incluye bailar”. En los próximos meses prevé inscribirse en la universidad.

Asimismo, Olga, de 32 años, está feliz de formar parte del grupo. Allí tiene amigos que la motivaron a retomar los estudios en el colegio.  Recientemente se graduó de bachiller y ahora tiene planes de cursar una carrera en la universidad.

En cambio, Esteban, de 28 años, practica baile y natación. Él participará en el Campeonato Nacional Paralímpicos que se desarrollará en Cuenca. La competencia será el 18 de abril. “Tenemos discapacidad visual, pero no somos menos capaces para hacer lo que nos propongamos”. Asimismo, Miguel asegura que las personas con discapacidad cuando caminan  lo hacen con seguridad y tranquilidad. “Cuando sabemos de casos de personas ciegas atropelladas lo que buscamos es que dejen de subestimarnos y que nos vean con igualdad”. (I)