El 5,1% de la carga mundial de morbilidad y lesiones es atribuido a la ingesta nociva de bebidas alcohólicas
El 59% del consumo de alcohol en el país se concentra en los sábados
Llega el fin de semana y la atención en los centros de diversión nocturna aumenta. Según un estudio de Euro Monitor International, el mayor consumo de alcohol se concentra en los sábados, alcanzando hasta el 59% más en comparación con los días de lunes a jueves que llega al 8%. Si bien los especialistas aseguran que beber licor no representa mayores riesgos para la salud, cuando es esporádico y en pocas cantidades, el consumo nocivo o el abuso del alcohol sí tiene afectaciones.
El informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de la ‘Situación sobre Alcohol 2014’ señala que el consumo nocivo de alcohol está asociado a trastornos mentales, alcoholismo y enfermedades no transmisibles como la cirrosis hepática, algunos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares. El documento indica además que el 5,1% de la carga mundial de morbilidad y lesiones es atribuido al consumo desmedido de alcohol.
¿Cuándo se llega al consumo nocivo? El psicólogo clínico y director del Centro de Ayuda Para el Tratamiento de Adicciones (CAPTA), Pedro Córdova, señala que hablar de consumo nocivo de alcohol es igual a hablar de un consumo dañino ligado a la adicción o dependencia, la cual se determina cuando hay una pérdida de control.
Según Córdova hay personas que no notan cuando han perdido el control porque aseguran: “yo solo bebo los fines de semana, aunque en realidad es parte del ciclo de la dependencia”.
La OMS advierte que “el grado de riesgo por el uso nocivo del alcohol varía en función de la edad, el sexo y otras características biológicas del consumidor, así como de la situación y el contexto en que se bebe”.
Córdova asegura que a más de las afectaciones en la salud, ingerir alcohol en exceso trae problemas laborales y en el hogar.
En ello coincide Javier Andrade, director del Centro para Tratamiento de Adicciones Sicoterapéutico, Censicau. Él señala que el abuso del alcohol o va más allá del daño físico porque tiene connotaciones sociales, mentales y psicológicas, que en el peor de los casos puede llevar a la muerte.
Embriaguez y accidentes
Desde enero a agosto de 2014, 1.706 personas tuvieron accidentes de tránsito en el país por conducir en estado etílico, según la Agencia Nacional de Tránsito (ANT).
Lo preocupante es que las muertes siguen aumentando. Por ejemplo, de abril a agosto de 2013 hubo 840 muertes, mientras que en 2014 en el mismo período la cifra creció a 1.076.
Si bien el alcohol per cápita se ha reducido a 4,2 y se encuentra por debajo del promedio regional, hay un universo de bebedores nocivos que sigue manejando sin conciencia. Para el psicólogo Christian Díaz, el consumo actual es más poderoso y adictivo que la propia heroína.
El médico manifiesta que el 70% de las personas que han ingerido bebidas de moderación ha tenido un consumo denigrante con el licor. “No va a encontrar una persona que consuma de vez en cuando y muera en un accidente”, enfatiza.
Según el psicólogo Andrade, al comienzo el alcohol produce disminución de la fatiga, pero cuando se consume todos los días, hay mayor tolerancia. Andrade aclara que cuando el paciente llega al grado de dependencia solo hay una forma de dejar el consumo. Esto ocurre cuando obtiene un nivel de conciencia y entiende que el alcohol está afectando su vida.
“El alcoholismo es una enfermedad que no tiene cura, es progresivo y mortal. Aquella persona que empieza a consumir poco, después va a consumir más hasta que llegue a un caos”, expresa. Lo que sí es una realidad es que hoy se consumen más productos con menos contenido alcohólico. El informe Euro Monitor International revela que en 2013 el mayor porcentaje de consumo fue de cerveza, con 63%, versus el 37% de otros licores.