Ecuador defendió este miércoles, en el marco de la Cumbre Mundial COP 23, en Bonn (Alemania), la necesidad de proteger y mantener la mayor cuenca hidrográfica del planeta, ubicada en la Amazonía, zona que comparten varios países sudamericanos.

Quito planteó su postura en una cita con representantes de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica, en la ciudad europea.

Al intercambio, la delegación nacional llevó la iniciativa 'Amazonía Sostenible al 2030', que busca recuperar el valor de la mayor reserva de agua dulce y factor determinante en el balance hídrico del planeta, así como la meta 'deforestación neta cero' en toda la cuenca, a través de la reducción de pérdida de bosques e intensificación de la restauración.

El proyecto prevé, además, potenciar la cooperación y acciones para la defensa efectiva de los derechos de los pueblos indígenas de este sector y en especial de los que permanecen en aislamiento.

"Es necesario renovar el compromiso de nuestros pueblos para multiplicar los esfuerzos y capacidades como países y como región amazónica", explicó el ministro de Ambiente de Ecuador, Tarsicio Granizo, quien lidera la delegación a la cumbre de Bonn.

La COP 23, que dura dos semanas, incluye segmentos de alto nivel, negociaciones técnicas, exposiciones, espacios con la sociedad civil y presentaciones de organismos multilaterales,

Ecuador va con doble rol, como país y en calidad de presidente del Grupo de los 77 más China.

Según Granizo, el mayor interés es defender a los países en desarrollo, particularmente en lo referente a los principios básicos de la Convención sobre Cambio Climático, entre otras responsabilidades comunes, pero diferenciadas.

"El mensaje de los países del Sur a los estados desarrollados es, en primer lugar, que sean ambiciosos en su meta de mitigación de los gases de efecto invernadero, y al mismo tiempo en el financiamiento requerido por los países en desarrollo para su lucha contra el cambio climático", aseguró.

La agenda de Quito también incluye el apoyo al pedido indígena, de formar parte cada vez más activa de las negociaciones para frenar ese fenómeno, teniendo en cuenta su papel fundamental en la protección del entorno.

Al respecto, la canciller María Fernanda Espinosa anunció que se logró concretar la creación de una plataforma para esas poblaciones, mediante la cual pasarán de ser sujetos pasivos de las decisiones de los estados a actores deliberantes con aportes en las reuniones, a partir de sus experiencias y conocimientos tradicionales.

Desde Bonn Alemania #EcuadorEnCOP23 como Presidentes del G77 + China abogamos por plataformas de igualdad de género y negociamos compromisos financieros por recursos para mitigar el cambio climático pic.twitter.com/WWiFqaPkj1

— Ma Fernanda Espinosa (@mfespinosaEC) November 15, 2017

En la COP 23 participan representantes de gobiernos con delegaciones de varias instituciones, miembros de la sociedad civil, organizaciones dedicadas al tema ambiental, entes de la Organización de las Naciones Unidas, de cooperación internacional y funcionarios de bancos, entre otros. (I)