Liberan a cóndor rescatado por presunto envenenamiento
El cóndor rescatado el pasado 23 de enero de 2019 en Latacunga, con signos de envenenamiento, presuntamente por la ingesta de carroña contaminada, fue liberado por el Ministerio del Ambiente en su hábitat natural luego de recibir atención médica en la clínica Planeta Vida, con el apoyo de Fundación Cóndor Andino.
El espécimen adulto alzó su vuelo en la cara sur del Parque Nacional Cotopaxi en el sitio conocido como Ticantilín portando un rastreador satelital y bandas alares que permitirá conocer sobre sus rutas, lugares de alimentación y dormideros.
El ave fue rescatada por miembros de la Unidad de Protección del Medio Ambiente de la Policía Nacional y del MAE Cotopaxi, quienes lo llevaron a la Clínica Veterinaria Planeta Vida, donde la médico veterinaria Martha Camacho y Diego Medina, también Médico Veterinario y Docente de la Universidad Técnológica Equinoccial (UTE), inició con el tratamiento de emergencia de desintoxicación.
En este caso el cóndor había sido víctima de un delito ambiental perpetrado por comuneros de la zona, quienes colocaron carne envenenada con organofosforados (agrotóxicos) para controlar las manadas de perros asilvestrados que están atacando su ganado.
“Lastimosamente, los cóndores se vieron afectados por esta acción humana. Pero la respuesta interinstitucional fue eficaz y ambos animales sobrevivieron”, comenta Andrés Ortega, Director de la carrera de Veterinaria de la Universidad UTE y Vicepresidente de la Fundación Cóndor Andino.
Si bien el cóndor más joven, luego de tres días se recuperó por completo y consiguió liberarse por su cuenta. En el caso de ‘Morro’, un cóndor macho adulto de aproximadamente 30-40 años, le tomó más tiempo recuperarse. Fueron 17 días de rehabilitación en el Centro de Rescate Ilitio, en el que se trabajó en fortalecer su musculatura y el seguimiento post hospitalario.
Erika Latorre, especialista de la Dirección Nacional de Biodiversidad del Ministerio, reconoció que la liberación se pudo realizar “cumpliendo con protocolos técnicos elaborados por el Ministerio del Ambiente con el apoyo de la Fundación Cóndor Andino, con el objetivo de garantizar su éxito”.
Sebastián Kohn, director ejecutivo de la Fundación Cóndor Andino, señaló que los dispositivos de rastreo y seguimiento son “importantes para la conservación de la especies, pues la información recabada nos permite implementar estrategias para su protección”.
Desde la Universidad UTE, la carrera de Veterinaria trabajará, bajo la dirección de Ortega, en programas de esterilización y educación sobre la tenencia responsable de mascotas. “Esperamos conformar un Centro de Investigaciones Veterinarias para el Estudio del Bienestar Animal (E.B.A), eje de nuestra carrera. De esta manera trabajaremos también en la conservación de la Fauna Silvestre y evitaremos que nuevos casos como el de Morro sucedan”, agrega Ortega.
El monitoreo permanente a los cóndores permitirá seguir su evolución tras su liberación de vuelta al medio natural, identificar áreas prioritarias de conservación, zonas de conflicto y amenazas para la especie y otra información que permita continuar mejorando las estrategias de conservación de esta ave emblemática del Ecuador y de la región andina. (I)