El retumbe de los timbales, los instrumentos de viento y los versos sincronizados de rap llamaron la atención de los quiteños que transitaban por la plaza Foch y se encontraron con el festival  “El beso intercultural”.

El pasado martes, desde una gran tarima instalada en  la plaza de la capital, decenas de grupos musicales expresaron con sus voces lo que representa para ellos la diversidad cultural.

“No se trata de hablar de razas, sino  de la variedad de culturas que existen en el país y no hay mejor forma de transmitirlo que  a través de la música”, explicó Mario Gamboa, integrante del grupo Clay-Ency, una banda conformada hace cinco años y que interpreta los géneros de rock, salsa y hip hop.

Ni la pertinaz lluvia que cayó durante el espectáculo fue impedimento para que los asistentes disfrutaran de las diferentes expresiones artísticas. Rockeros, punkeros y raperos se acercaron al lugar para acompañar con las palmas a las agrupaciones Azúcar, Tránsito Amaguaña, Ochun, Los Nin, entre otras.

Robinson Delgado   es afrodescendiente y tiene una novia mestiza (Mayra, de 17 años) con quien sale desde  hace seis meses. “Nos llevamos muy bien. Ella me entiende en muchas cosas y la quiero mucho”, sonrió, mientras aseguraba, convencido,  que no siente vergüenza cuando se besan   en la calle.

María Lorena Ortiz, analista de Interculturalidad de la Secretaría, Movimientos Sociales y Participación Ciudadana, explicó que esta propuesta va más allá de la música. “Es una reivindicación de lo que la cultura occidental conoce como el Día del Amor y la Amistad”, indicó.

La propuesta salió del Departamento de Interculturalidad para desalentar el  racismo.
A través del Decreto Nº 60, se estableció como política pública el Plan Plurinacional, que busca eliminar la discriminación y el departamento considera que  la mejor forma de hacerlo   se encuentra, por supuesto,  en el amor. De ahí que el acto fue llamado “El beso intercultural”.

“El beso es la forma más espontánea de expresar afecto”, comentó  Ortiz.
La música no se detuvo hasta las 19:00 y aún así, los ánimos no decayeron en los jóvenes que se protegían de la lluvia con paraguas y ponchos para  agua.

En medio del frío, varias parejas que asistieron a la plaza Foch   se animaron a darse un beso, no solo por el cariño que se profesan, sino porque están en contra  de todas las formas de discriminación que aún lastiman a la sociedad.

Menos del 1.5% está trabajando este momento

En  el país, el  21,6% de la población pertenece  a un  pueblo o nacionalidad. De este grupo, el 7,2% es afroecuatoriano, el 7% es indígena y el 7,4%,   montubio.

Ortiz indicó que de acuerdo con  estas cifras se deberían aplicar acciones afirmativas en salud, educación e inclusión laboral.

Sin embargo, esta situación todavía no se hace realidad. Por ejemplo, menos del 1,5%  del total de pueblos   se encuentra inmerso en el área laboral.

En al área educativa, se   trabaja  para que los estudiantes ecuatorianos puedan conocer  la historia de las diferentes etnias que hay en Ecuador; mientras que en   salud pública se   intenta   recuperar los saberes ancestrales en el campo de la medicina, al punto de que actuañmente se impulsa  un plan que   brinda tratamientos que pertenecen a las ricas y extensas tradiciones nacionales.