En el país funcionan 15.000 unidades educativas. De ellas, cerca de 10.000, entre públicas y privadas, implementaron en sus aulas la metodología Tierra de Niñas, Niños y Jóvenes para el Buen Vivir (TiNi). Así lo informó este martes 26 de junio Fánder Falconí, ministro de Educación.

La iniciativa ambiental consiste en que los establecimientos educativos cuenten con espacios verdes. Estos pueden ser desde medio metro cuadrado en adelante.

Ahí, los estudiantes experimentan un acercamiento hacia la naturaleza, a través de la siembra de plantas que pueden usar y consumir. Como cedrón, manzanilla, romero, entre otras.

Este martes 26 de junio se inauguró en Quito otro de estos espacios. Hasta la unidad educativa La Inmaculada, en el norte de la urbe, llegó Rocío González. La primera dama fue nombrada embajadora de la iniciativa. También es la presidenta del Comité Toda Una Vida.

Resaltó que la metodología ambiental cristaliza los esfuerzos por construir una educación innovadora, sensible con la naturaleza y respetuosa con “la madre tierra”.

Agregó que la metodología aplicada está alineada con la visión del Plan Toda Una Vida, cuya prioridad es la niñez y la juventud.

Según la primera dama, el enfoque ambiental también es implementado en la Misión Casa para Todos. Se lo hace con la construcción de barrios con amplios espacios verdes, canchas y juegos infantiles.

Para Saadia Sánchez, directora de la oficina de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en Quito, la metodología fortalece el trabajo que busca el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible.

En el 2012, TiNi fue reconocida por la Unesco como una buena práctica de educación ambiental.

La metodología, creada por la Asociación para la Niñez y su Ambiente-ANIA de Perú, se aplica en más de 10 países y “es una área de tierra o una maceta en la que los niños y jóvenes se encargan de criar la vida y la biodiversidad con amor”, señaló la viceministra de Gestión Educativa, Mónica Reinoso.

Según la cartera de Educación, desde septiembre de 2017 hasta junio 2018, son 10.021 instituciones educativas con espacios TiNi, con 161.623 docentes y más de 2’640.000 estudiantes beneficiados.

Falconí indicó que la iniciativa ambiental tiene éxito por tres razones. La primera es que la metodología no es obligatoria, la segunda es que la implementación se realiza a través de manuales y procedimientos adecuados y finalmente, que los estudiantes se apropian de esos espacios y así se convierten en precursores del cuidado del planeta.

El titular del MinEduc aseguró que no se puede concebir una educación que no se sustente en valores, en calidad, en infraestructura digna y con espacios libres de violencia. (I)