El estreno del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de Chile comenzó este lunes 17 de diciembre con la presentación de su flamante ministro, Andrés Couve Correa, quien tendrá ante sí una tarea nada fácil.

El nombramiento público del titular, el primero de esa nueva cartera que fue aprobada en agosto último, fue hecho durante un acto en el palacio de la Moneda por el presidente Sebastián Piñera.

Couve, de 49 años, es conocido en los medios científicos del país por haber encabezado el Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica (BNI) con sede en la facultad de Medicina de la Universidad de Chile.

Es considerado una de las principales voces del mundo científico propulsoras del involucramiento de los gobiernos para impulsar la importancia de la ciencia para el desarrollo del país.

Asimismo, estuvo muy vinculado a la formación del nuevo ministerio desde la Comisión Presidencial de Ciencia para el Desarrollo formada durante el gobierno de Michelle Bachelet, que estableció las bases para el proyecto que fue finalmente aprobado y puesto en marcha durante el actual mandato de Sebastián Piñera.

Su segunda al frente del organismo será Carolina Torrealba Ruiz-Tagle en la única subsecretaría de la cartera, funcionaria que procede también del sector científico.

Ella formaba parte del directorio de la Fundación Ciencia Joven, cuyo objetivo es mejorar la educación en Chile a través del desarrollo de academias escolares, retiros para profesores y campamentos de verano.

Según opinión del flamante ministro, sus objetivos al frente del organismo son estimular el trabajo en equipo y motivar de forma permanente al Gobierno en temas presupuestarios para que se le brinde una mayor prioridad a las investigaciones en todos los campos.

Personalidades científicas locales consideran que si Chile quiere convertirse en una nación desarrollada, tal como propugna el actual Gobierno, deberá destinarse a investigación y desarrollo 10 veces más de lo que se cuantifica actualmente, lo cual no es, como algunos piensan, un gasto inútil, sino una inversión a futuro.

Según la perspectiva gubernamental, el nuevo ministerio asesorará y colaborará con el presidente de la República en el diseño, formulación, coordinación, implementación y evaluación de políticas y planes destinados a fomentar y fortalecer la ciencia, la tecnología y la innovación derivada de la investigación científico-tecnológica.

Además, debe promover que el conocimiento y la innovación enriquezcan los procesos de formulación e implementación de políticas públicas, fomentando la coordinación y colaboración interministerial e interregional, el desarrollo de iniciativas conjuntas dentro de los sectores público y privado.

Entre sus numerosas funciones también están la generación y fortalecimiento de capacidades humanas, de infraestructura e institucionales para el desarrollo de la ciencia, artes y humanidades, la formación de profesionales e investigadores, así como promover una cultura científica, la comprensión y difusión de la ciencia en el país. (I)