Al mismo tiempo en que la cantante brasileña Daniela Mercury, de 47 años y con cinco hijos, “salía del closet” y declaraba su amor a su pareja en la red social Instagram, colectivos de Brasil y del resto de los países de América Latina reclamaron a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ampliar la protección de los derechos  de gays, lesbianas, transgéneros y transexuales, durante un encuentro de diferentes agrupaciones GLBTI que se realizó en Brasilia  la semana pasada.

Este pedido se realiza ante un escenario preocupante para la comunidad homosexual en Brasil, que denuncia el avance de un supuesto "fundamentalismo religioso" sobre  las instituciones sociales. El secretario latinoamericano de la Asociación Internacional de Lesbianas y Gays (Ilga) sostuvo que fueron 330 ciudadanos homosexuales los asesinados en distintas acciones homofóbicas durante todo el año 2012 en Brasil.

En este país la homofobia ha cobrado relevancia: un pastor evangélico acusado, precisamente, de homofóbico (además de racista) ganó la presidencia de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados y se transformó en una figura pop en los medios de comunicación.

El movimiento gay ha sido expulsado de sus sesiones en el Congreso durante las reuniones de comisión del diputado Marcos Feliciano, del Partido Social Cristiano (PSC), quien se ha convertido en el enemigo público número uno de las minorías y sobre quien pesan decenas de pedidos de renuncia al cargo.

En este contexto, el Partido de los Trabajadores -mediante la ministra de Derechos Humanos, Maria do Rosario Nunes- convocó a un seminario entre latinoamericanos y europeos para trabajar contra la homofobia. Se contó con la participación de la primera dama cubana e hija del presidente Raúl Castro,  la sexóloga Manuela Castro, directora del Centro de Educación Sexual de su país, y por parte de Ecuador, la representante de la Asociación Silueta X, Diane Rodríguez.

"El Encuentro sobre Derechos Humanos, Orientación Sexual e Identidad de Género desarrolló una resolución para incluir la temática de la defensa de los derechos humanos frente a  la ONU", señaló  Rodríguez, quien recordó el enfrentamiento con el pastor evangelista Nelson Zavala, candidato en las elecciones de febrero pasado.

"Una situación parecida con la que se vive hoy en Brasil", dijo, al comparar este caso con el del diputado Feliciano, famoso por haber dicho que existe una maldición sobre  África y que los homosexuales son personas que necesitan atención médica y psicológica. "Existe una dictadura gay en Brasil y un prejuicio contra todos los que creemos en Dios", se defendió el diputado, pastor de la Asamblea de Dios.

Existe en el Congreso de Brasil un bloque evangelista con 60 diputados. Esa bancada, influyente para la sanción o rechazo de cualquier proyecto de ley, ha convertido a tales legisladores en una especie de objeto de deseo de sus pares.

No por sus dichos o posiciones, sino por su poder dentro de la legislatura. Ellos lo saben y hacen valer su presencia. Por ejemplo, hasta la presidenta Dilma Rousseff determinó suspender la entrega en las escuelas de un manual sobre educación sexual que había sido objetado por los evangélicos, potenciales aliados para una eventual reelección en 2014.

Ya en la campaña electoral presidencial de 2010, sectores católicos y evangélicos habían acusado a la entonces candidata Rousseff de que intentaría legalizar el aborto, de llegar a la primera magistratura. "Estamos en un momento crítico, del fundamentalismo religioso. La presidenta ha retrocedido lamentablemente por el poder evangélico", dijo el dirigente De Jesús, titular de la asociación brasileña de Gays, Lesbianas, Travestis y Transexuales.

En este sentido, son los evangélicos quienes colocan trabas en el Congreso de Brasil para un proyecto de ley que criminaliza la homofobia y sobre el cual están sentados en forma firme los partidos que dependen de su base de  evangélicos.  

Un 30% de Brasil practica estas religiones de corte pentecostal. Es, además, el país con más católicos del mundo y el primer destino al exterior del papa Francisco, quien visitará Rio de Janeiro en julio para participar de la Jornada Mundial de la Juventud.    

Por su parte, el diputado pastor Marcos Feliciano da de qué hablar a la prensa. El   lunes fue divulgado en You Tube un video con un sermón de hace varios años, en el que habla de John Lennon, asesinado por un fanático, diciendo que había "ofendido a Dios por decir que los Beatles eran más populares que Jesucristo", para asegurar que los tres disparos que recibió el cantante fueron "por el Padre, el hijo y el Espíritu Santo" (en realidad fueron de cinco a ocho disparos).

Las organizaciones reunidas en Brasilia emitieron un comunicado reclamando al Consejo de Derechos Humanos de la ONU hacer hincapié en las próximas reuniones de Ginebra sobre la violencia homofóbica. Los intentos de imponer una sola forma de creencia e ideología ponen en peligro vidas al incitar a la violencia y la discriminación y a la propia democracia", dice el documento.