La inversión de las 58 uem entregadas supera los $ 262 millones
226 colegios serán repotenciados hasta 2017
El Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo (Terce), a cargo de la Unesco, reveló los avances en el aprendizaje de los estudiantes ecuatorianos. Los resultados de 2013 respecto al informe anterior -realizado en 2006- fueron mayores en 43 puntos en todas las áreas evaluadas y ubican al país en el grupo de naciones que alcanzaron puntajes por encima de la media teórica.
El coordinador de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) de la Red de Maestros, Agustín Lindao, menciona que en base a esta conclusión Ecuador ha mejorado su calidad educativa, pero el reto en 2016 es “iniciar un plan agresivo” para subir más los niveles.
Precisamente esa fue una de las metas propuestas por docentes, padres de familia y estudiantes que elaboraron el borrador del Plan Decenal de Educación, entregado al ministro del ramo, Augusto Espinosa, en diciembre de 2015. En el documento, que será presentado en febrero próximo, se menciona que hasta 2025 Ecuador espera tener uno de los mejores sistemas educativos de Latinoamérica.
Lindao señala que para lograrlo el Estado se ha preocupado de la infraestructura de las instituciones. Hasta 2017 se contará con 400 nuevas unidades educativas, la mitad será del milenio. Hasta el momento se han construido 58 con una inversión de $ 262’109.000, además de 300 planteles provisionales con todas las adecuaciones del caso.
Actualmente se ejecuta el programa de repotenciación de unidades educativas, con 30 colegios en proceso y 5 ya entregados a la comunidad. Uno de ellos fue la Unidad Física Experimental Teodoro Gómez de la Torre en la parroquia San Francisco de Ibarra. Hasta 2017, 226 en total deberán ser reestructurados.
Lindao añade que uno de los puntos que ha permitido el progreso en la enseñanza es la entrega de textos gratuitos para la Educación Básica y de Bachillerato, así como el programa del almuerzo escolar implementado en las instituciones réplicas y del milenio.
Las reformas en la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI) también han sido favorables para el sistema, según los docentes consultados. La mayoría aplaudió el cambio de la jornada laboral, un reconocimiento por el que dicen habían luchado. Desde el año pasado, 6 horas de trabajo se realizan dentro de la institución y las 2 horas restantes fuera del mismo.
Generalmente ese tiempo es ocupado en casa para realizar planificación, elaboración de materiales didácticos o trabajar en la comunidad educativa en línea, desde donde pueden subir notas y comunicarse con los padres de familia para informar sobre las asistencias y atrasos de sus hijos.
“Era más eficaz trabajar unas horas fuera de las instituciones porque muchas de ellas no contaban con laboratorio ni sala de profesores en donde se pueda trabajar”, expresa Lindao.
El magisterio ve también con agrado la capacitación hacia ellos y la entrega de becas de maestrías en universidades extranjeras de categoría A. A esto se suma el respaldo a la recategorización, ya que ahora el sueldo básico de un docente es de $ 817 dólares con la posibilidad de ir escalando.
Lindao, quien también se desempeña como rector del colegio Amarilis Fuentes Alcívar, en Guayaquil, sostiene que los maestros están satisfechos con el proyecto de traslado, el cual les permite pedir el cambio de institución si laboran en sectores rurales o alejados de su vivienda, luego de 2 años de trabajo. “Antes se lo realizaba en la rueda de cambio y demoraban 3 años”, dice.
En medio de los cambios positivos presentados el año pasado, enfatiza que aún esperan un análisis de las autoridades para retomar el proceso de jubilación voluntaria de los profesores.
El coordinador de la Red de Maestros en la Zona 8 menciona que la comunidad educativa en egeneral está comprometida para lograr que el sistema ecuatoriano sea el mejor. (I)