El río Upano está considerado como el cuarto mejor del mundo para el rafting
Al suroriente del Ecuador se halla Macas, capital de Morona Santiago, ciudad que alberga aproximadamente a 41.000 habitantes. Uno de sus principales atractivos es el río Upano, que nace en las alturas de las lagunas de Tinguichaca. Este se nutre de 13 afluentes y a lo largo de sus 97 kilómetros da lugar a un valle que lleva su mismo nombre.
La variedad de ecosistemas que convergen en dicho valle reúne condiciones ideales para la práctica de senderismo. Las rápidas aguas que bañan este territorio crean el espacio propicio para la práctica de deportes de aventura como el canyoning, tubbing y sobre todo el rafting, que son considerados deportes extremos.
El rafting consiste en descender a lo largo de un río de aguas bravas, empleando un bote sin motor. Según el libro Journeys of a Lifetime publicado en 2007 por National Geographic, el Upano es considerado el cuarto mejor río para la práctica de rafting. Este texto destaca el desfiladero de Namangosa, que posee rápidos de clase IV. De la misma forma exalta las numerosas cascadas y la posibilidad de realizar turismo cultural en comunidades Shuar.
Más de diez años de experiencia condujeron a Manuel Landi a emprender en el campo de los deportes de aventura. Con una inversión de más de $ 5 mil adquirió los equipos necesarios para este fin, atrayendo así la práctica de rafting hasta la ciudad macabea.
“Andábamos con unas boyas divirtiéndonos en el río y con el paso del tiempo y el apoyo del Consejo Provincial llevamos esta actividad a un nivel más responsable, un emprendimiento turístico”, afirmó.
Previo a la realización de estos deportes, los guías realizan charlas introductorias, para explicar cómo usar el equipo (chaleco salvavidas, casco, cuerdas y remos), cómo remar en el caudal y sobre todo cómo reaccionar ante eventuales contratiempos. Además se indica que todas las rutas cuentan con la presencia de un kayak de rescate. Estas charlas duran más de una hora para los aventureros.
Un recorrido simple abarca entre 60 y 90 minutos y tiene un valor de $ 25 por persona. No obstante, en conjunto con operadores turísticos del lugar se implementaron paquetes que integran recorridos a cavernas, avistamiento de conchas petrificadas, camping, visitas a termas, entre otros sitios.
Jessica Ávila, propietaria de la agencia de viajes S3 expeditions, enfatiza que el potencial turístico de la ciudad y la provincia es amplio, además la experiencia del rafting se puede compartir, tanto entre amigos como en familia, puesto que el caudal del río no representa una amenaza.
“Fue la primera vez que hice rafting y la experiencia fue única, divertida e inolvidable”, señaló Ávila. (I)