La avenida  Maldonado, al sur de Quito, fue el sitio de partida de la larga caminata que emprendieron Álex Padilla, alcalde de Calvas (Loja) y del andinista Pedro Peralta Jiménez, por un fin benéfico.
Previo a ello, una delegación de la colonia de calvenses residentes en la capital ecuatoriana y  una delegada de la Congregación de las Hermanas Dominicas, realizaron un acto simbólico de reconocimiento a las dos personas.

Fueron 53 km que recorrieron en  el primer tramo. Al día siguiente  partieron desde el sector de Lazo hasta la ciudad de Ambato en un trayecto de 57 km.
El  30 de noviembre se despidieron de la tierra de los Tres Juanes para descansar en la ciudad de Riobamba, caminaron 48 km.

Luego llegaron a Guamote con un trayecto de 46 km. Continuaron por Alausí, El Tambo, Cañar, Azogues, Cuenca, La Paz, Oña, Saraguro, San Lucas, Loja, Matala (Catamayo) y finalmente llegaron a Cariamanga (Calvas).

En el sector de las Pitas,  al norte de la urbe, fueron recibidos por sus familiares. Mónica Quezada, esposa del burgomaestre,  lo esperó en el lugar para darle el respectivo abrazo y bienvenida.

Dijo que la comunicación vía celular fue importante durante todo el recorrido.
Padilla y Peralta salieron de Loja el 11 de diciembre para pasar por  Catamayo y descansar en el barrio Matala, cantón Gonzanamá. Instalaron carpas para pasar la noche. Al siguiente día culminó la caminata en la ciudad de Cariamanga.  

Aunque no concretó el monto total del presupuesto que destinó para el recorrido, explicó que al día gastaban alrededor de 100 dólares. 

El dinero lo utilizaron para la alimentación, hospedaje, hidratación y confección de camisetas.
Adicionalmente los acompañaron dos personas que se movilizaban en un vehículo  de propiedad del Alcalde. El dinero para el combustible y mantenimiento del carro también fue tomado en cuenta en el presupuesto.

Padilla afirmó que durante el recorrido hubo días muy soleados y  bajas temperaturas, pero al llegar a la capital de Chimborazo, fueron sorprendidos por fuertes aguaceros. Otra torrencial lluvia los sorprendió en la parroquia de San Lucas, ya cerca de la ciudad de Loja.  
Relató que en el transcurso de la caminata no se acercó ninguna  autoridad.  El burgomaestre estuvo acompañado por el experimentado montañista cariamanguense Pedro Peralta.  Su carta de presentación es haber escalado al nevado del Chimborazo.

Una ampolla en uno de sus pies, lo obligó a suspender su recorrido en un determinado tramo.
“Logró curarse él mismo y continuó con la travesía”, dijo Padilla.
La caminata es  un gesto de solidaridad que pretende recaudar fondos para la ampliación del hogar de adultos mayores San José en la ciudad de Calvas.

“Queremos fomentar una cultura de la solidaridad, para que la ciudadanía no dependa del paternalismo estatal, que ayude a mejorar la calidad de vida a los más necesitados”, aseguró Padilla.