Los bomberos no tuvieron descanso el fin de semana en las provincias del Azuay y El Oro.

Los incendios forestales continuaron arrasando grandes extensiones de montañas.

Cinco incendios de proporciones se registraron entre sábado y domingo en ambas regiones.

En la provincia del Azuay, en el sector de Molleturo, la situación fue grave debido a que los socorristas no podían llegar con facilidad por lo agreste del lugar.

En el sitio, a más de los bomberos trabajaron cien militares con batefugos, machetes y ramas para tratar de sofocar las llamas que a momentos parecían ganar la batalla.

Según el coronel Marco Martínez, vocero de la III División de Ejército Tarqui, se realizaron sobrevuelos para evaluar la situación y se dio apoyo a la Secretaría de Gestión de Riesgos.

En la provincia de El Oro, en las inmediaciones de la cordillera de Chilla, laboraron 120 soldados, mientras en Loja, en el sector Pan de Azúcar, sector Santa Teresita, estuvieron 100 hombres e igual cantidad en San Pedro de Aradas.

En el territorio azuayo, sector de Molleturo, y en el cañarejo, sector Bellevista, un centenar de uniformados fueron enviados a cada lugar.   “Están 36 oficiales, 676 voluntarios (tropa), 378 conscriptos, 3 helicópteros, 32 camiones, 16 vehículos, 1 buseta y 3 camionetas”, dijo Martínez.

Casi 2 mil has arrasadas

El incendio de gran magnitud registrado en el cantón Chilla ha afectado hasta el momento 1.900 hectáreas de plantaciones de pino y pasto seco, en los cerros, Rusiococha, Chillacocha, Portete, Mezaloma y Chilola.

El siniestro, que empezó desde la tarde del 6 de septiembre,  no puede ser controlado aún, debido a que en varias ocasiones el permanente viento ha reavivado el fuego cuyas causas aún se desconocen.

La directora provincial de El Oro de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, Rosa Cabrera, afirmó que los organismos de socorro se mantienen vigilantes de la emergencia por la que atraviesa Chilla y este monitoreo se mantendrá.

“Tenemos noticias de que se activó el fuego, pero esperamos que con los elementos de Bomberos, Policía y militares que están trabajando en ello, podamos contrarrestarlo lo más pronto posible”, señaló. Ahora, dijo,  los elementos de la ‘casaca roja’ están trabajando para que no quede ni un solo foco del incendio. “La lucha es  para asegurarse de que el fuego no vuelva a encenderse”, manifestó.

Hasta  la mañana de ayer, 21 bomberos orenses, 30 militares, 5 civiles del Municipio de Chilla y 8 funcionarios de la Secretaría de Riesgos permanecían en el sitio.

Hoy está previsto que se instale el Comité de Operaciones de Emergencia provincial con el objeto de efectuar un análisis de la situación.

Ayer, el principal riesgo era que el fuego contaminase las inmediaciones del cantón Atahualpa, en la parte alta de El Oro.

El jefe político de Chilla, Zoilo Matailo, dijo que por ahora no están en peligro los sitios poblados.

Empero indicó que los filos de los  cerros Tamboloma y Payana eran los que estaban ardiendo.

Al cierre de la edición, los bomberos no tenían el control de las llamas ni en El Oro ni Azuay.