Sigue emergencia cerca de centro comercial
Las ventas informales en los alrededores del Centro Comercial Loja se han convertido en dolor de cabeza para la administración municipal.
Los operativos y alternativas de regulación no dieron resultados, por ello Jorge Bailón Abad, alcalde de Loja, en conjunto con varias instituciones públicas acordaron ampliar el plazo de emergencia por 90 días más para controlar las ventas informales.
El 10 de mayo de 2013 el Cabildo resolvió la declaratoria de emergencia para el centro de abastos más grande de la ciudad, por 180 días; sin embargo, como no hubo mejoras, las autoridades resolvieron aumentar el plazo.
Los controles en el centro comercial serán más intensos, a tal punto que habrá la presencia de militares en coordinación con la Policía Nacional, indicó Bailón.
Acotó que la reubicación de los comerciantes ambulantes sería en la terraza del mismo Centro Comercial Loja o en algunos puestos vacantes en otros mercados; sin embargo, éstas personas ubicadas en el pasaje Eloy Alfaro y Rocafuerte rechazaron la propuesta porque la gente no acude a esos lugares, “No nos moverán de aquí, queremos que el propio alcalde venga a dialogar y nos dé una solución verdadera”, dijo la comerciante María Sánchez.
Durante los últimos días se produjeron los primeros desmanes en ese sitio. Los vendedores informales manifestaron que uniformados de la Unidad Municipal de Seguridad Urbana intervinieron en forma violenta. Denunciaron que una mujer de avanzada edad resultó con lesiones por evitar que le quiten su mercadería, y fue atendida en el área de Emergencia del hospital Isidro Ayora.
Producto de esas actitudes, los comerciantes informales colocaron en la entrada del centro de abastos, ubicado en la calle Rocafuerte y pasaje Eloy Alfaro, carteles de protesta y mensajes de no al maltrato.
Ángel Luzuriaga, director ejecutivo del Consejo Cantonal de Seguridad Ciudadana, manifestó que los operativos de control en los alrededores del centro tendrán el respaldo de los miembros de la Unidad Municipal de Seguridad Urbana, Policía Nacional, Ejército e Intendencia General de Policía.
Añadió que es necesaria la regulación de la venta informal, no solo en el principal centro de abastos, sino también controles en los mercados ubicados en el sector de la Gran Colombia y San Sebastián. “Nosotros no estamos en contra del trabajo ambulante, pero es prioritario un orden”, dijo.
Algunos ciudadanos manifestaron también su desacuerdo con la informalidad. Felipe Mora aseveró que después de las 18:00 las veredas de las calles 10 de Agosto entre avenida Universitaria y 18 de Noviembre se convierten en una feria libre por la presencia de vendedores de ropa, comida, calzado y otros artículos. Explicó que el aglutinamiento también genera otros problemas como: conflicto vehícular, dificultad para la circulación peatonal e insalubridad. “Debería el alcalde solucionar el problema de manera oportuna e inmediata, porque la situación cada vez es más caótica”, dijo Mora.