El problema de falta de agua en Machala y en el cantón  El Guabo aún se sintió ayer, pese a que la Empresa de Aguas y Servicios de El Oro (EASO) anunció su restablecimiento el miércoles en horas de la tarde.

Esto no se dio en diferentes barrios del sur de la ciudad y la parroquia Puerto Bolívar, donde  se abastecieron con tanqueros. El problema se dio luego de que el último fin de semana se rompiera la tubería principal que abastece a los dos cantones. 

Voceros de la entidad anunciaron que los trabajos de sustitución de los tramos del acueducto de 700 milímetros que presentó roturas en tres puntos diferentes, el domingo último, fueron superados, sin embargo, hasta ayer no tenían agua varios sectores de la ciudad. “Esta semana ha sido muy difícil, no hemos podido hacer las cosas en la casa, nos ha tocado pedirle al vecino que tiene una cisterna grande, pero ya no nos quiere dar porque no se sabe cuándo vendrá el agua”, dijo una mujer del barrio Amazonas en Puerto Bolívar.

“Estamos sin ninguna gota de agua desde hace tres días, ni los tanqueros vienen para que nos vendan; el agua de la cisterna se vació y ahora toca ir al pozo”, dijo Efraín Hurtado, del barrio El Bosque, sector 2. Y es que la falta de agua obligaba a las familias a sacar baldes y tanques para esperar  que cruzara algún tanquero, los mismo que durante esta semana han recorrido la ciudad. “Al menos unos 20 tanqueros nos encontramos recorriendo la ciudad, ya que mucha gente pide agua; nos llaman de varios sectores y no podemos abastecerlos a todos. Pero en estos momentos hay que aprovechar, ya que no todos los días tenemos trabajo”, manifestó Alberto Torres, quien recorre con su tanquero el sur de la ciudad.                      

Otro de los problemas que ha generado  la escasez de agua es que la planta danesa ubicada en la parroquia El Cambio presenta daños en el bombeo y actualmente trabaja con dos  de los siete pozos que tiene, así lo dijo el gerente de la ESO, Hugo Armijos. Armijos dijo que la falta de agua afecta a un 60% de la población machaleña con la rotura del acueducto.

En Azogues hay fallas en el servicio

Desde hace un mes la dotación de agua para el consumo humano se ha vuelto irregular para los habitantes de Charasol en Azogues, quienes al igual que otras parroquias no cuentan con el líquido todos los días.  

Actualmente la empresa tiene 9.500 usuarios, de los cuales 1.219 son de la parroquia de Charasol y 684 de Javier Loyola, quienes desde hace más de un año han tenido inconvenientes con el suministro de agua. Melba Ruiz, quien vive desde hace cinco años en Charasol, señaló que debían almacenar el agua en tanques, tachos o  lavaderos  porque  los días martes y jueves suspendían el servicio. “Ahora se nos va por horas, pero ya no los dos días a la semana como antes ”, explicó.

Este problema obedecía  al daño de unas válvulas reductoras o sostenedoras de presión en la reserva de El Corte, sin embargo, según Marcelo Vázquez, gerente de la Empresa Pública de Agua Potable y Saneamiento Ambiental de Azogues, éstas  fueron ajustadas, por lo que el servicio comenzó a tener continuidad. “Aún estamos haciendo pruebas; hay pequeñas dificultades con las redes antiguas, pero con el cambio de acometidas y también con la conducción de Toctesol vamos a dar continuidad al servicio para este sector y otros”,  dijo Vázquez.

Para mejorar el sistema en este sector y otras parroquias, como Javier Loyola, donde aún tienen inconvenientes con el servicio,  se construyó  la conducción del agua potable desde el sector de Toctesol hasta Rumihurco.