A las 07:30 y a las 17:00, las calles aledañas al centro de  Machala  se vuelven intransitables.
Esto debido a los trabajos  de regeneración urbana, en un tramo de la calle Rocafuerte,  que realiza el Municipio desde hace más de un mes.

A ello se suman  las obras que realiza la empresa de Aguas y Servicio de El Oro (ASO), en las vías por donde circulan varios buses urbanos.   

“Parece que en Machala estuvieran buscando un tesoro. Hay huecos por todos lados”, expresó enérgicamente Julio Pereira, quien tocaba el claxon de su vehículo para que circulasen otros carros que estaban delante del suyo.    

Este malestar se repite entre los conductores que a diario tienen que circular por el casco central, para ir de oeste a este y de norte a sur.

Los buses que cubren la ruta Puerto Bolívar–El Cambio  ya no cruzan por el centro de la urbe, pues en la calle Vela tienen que girar para tomar la Pichincha.

Ahí se encuentran con otra obra que realiza la ASO, que es la sustitución de tuberías. Debido a esos trabajos  solo un carril queda habilitado para los automotores, causando otro embotellamiento.

La calle Pichincha es utilizada por los buses y vehículos livianos desde que se inició la construcción de la Rocafuerte.

Son cuatro cuadras las que serán regeneradas en la calle Rocafuerte. Esta obra cuesta  cerca de $2 millones   y será similar a lo erigido en  la calle 25 de Junio.    

Al tráfico de los carros particulares se suman los buses intercantonales e interprovinciales que tienen sus estaciones en el centro de la capital orense.

Peter Chávez, taxista machaleño, a las 17:00 cogió una carrera en la zona central y tuvo  problemas para salir de una cuadra.

Manifestó que las obras  deben construirse en orden y no hacerlas conjuntamente.     
“Los más perjudicados somos nosotros que circulamos a diario por estas calles. Está muy bien la regeneración, pero al menos debería existir un plan para descongestionar esta área”, sostuvo.

La terminal  ya tiene luz verde

Una vieja aspiración de los choferes y la ciudadanía es la construcción de la terminal terrestre.       
Este edificio es vital para que varias estaciones de buses salgan del centro de la ciudad.

La obra ya tiene  luz verde por parte del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) y desde este mes entró en proceso de licitación, anunció el alcalde Carlos Falquez.

El burgomaestre expresó que la central de pasajeros será una de las mejores de Latinoamérica.
La obra costará cerca de $14 millones y se construirá al oeste de la ciudad.

En un terreno de  54.800 metros cuadrados se levantará la terminal que la municipalidad aspira a concluir a finales de 2014.

Según el cabildo, el año pasado se contabilizaron más de 40 mil vehículos que circulan a diario por las calles de la ciudad, pero cada año hay un aumento del 5%.