Carlos Guerrero llegó a Machala desde su natal Quito para vacacionar. Como aficionado al arte, lo primero que hizo fue buscar centros culturales que le pudiera ofrecer la capital orense. Fue al Museo Marino, ubicado en el malecón de Puerto Bolívar. Ahí observó las diferentes muestras de especies acuáticas, fósiles de ballenas y tiburones.

Sin embargo, quiso recorrer otros sitios, preguntó y notó que Machala tiene poco espacio para expresar el arte. Como amante de la pintura, quiso visitar una galería, pero no la encontró.

Luis Serrano García, presidente de la Casa de la Cultura, Núcleo de El Oro, coincide con el visitante en que la ciudad no tiene suficientes espacios para expresar las diferentes actividades culturales.

Para esto, él, como representante de una institución cultural, asegura que ha venido luchando para crear más espacios para los artistas. “Vemos que los parques de la ciudad se han construido, sin dejar un espacio para el arte”, dijo el funcionario, quien aseguró que en agosto, por cuenta propia, salieron a las calles y veredas de la ciudad para expresar la cultura costeña.

Machala no cuenta con una ruta de la cultura. Los únicos sitios representativos son el Museo Marino, en el que los viernes los artistas tienen su espacio; la Casa de la Cultura, donde se desarrollan obras de teatro, danza, etc., en el paseo Diego Minuche Garrido, donde esporádicamente se realizan exposiciones de libros.

Sin embargo, en estos lugares los artistas tienen que, mediante oficio, pedir permiso para ocupar los espacios y exponer. “Semanas atrás una joven violinista fue retirada por los guardias municipales del parque central, porque no había solicitado la autorización. Yo me detuve a verla, porque en Machala es poco común ver esa expresión de arte”, dijo Carmen Loaiza, quien fue testigo del hecho.

Grupos de teatro —callejero, como formal— reclaman espacios adecuados para exhibir su talento. Los viejos teatros fueron cerrados y no hay locales para mostrar la creatividad nacional. La mayoría de los artistas machaleños han demandado por años más espacios culturales.

Ángel Vélez, conocido teatrero, fue uno de los promotores para que se construya un teatro en Machala. Considera que hay muy poco apoyo para el artista, la escasez de arte hace que la gente pierda el interés por conocer las diferentes expresiones artísticas.

Uno de los autores de la investigación cultural en Machala, José Manuel Castellanos, indica que este campo en la capital orense es negativo. En su estudio concluye que se manifiesta una amplia visión de malestar y estado de crisis dentro de la cultura. Según él, se evidencia una desconexión informativa entre la ciudadanía y la gestión cultural.

Considera a la Casa de la Cultura Ecuatoriana Núcleo de El Oro como la institución mejor valorada, aunque señala que “ninguna” institución en Machala presta atención a la cultura.

“Machala, una de las ciudades más grandes del Ecuador, de mayor economía y que no tenga teatro, es una vergüenza”, dijo el presidente de la república Rafael Correa, en su visita a la capital orense en mayo de 2014. (I)