Parte de los estudios se realiza con base en la información que arroja el chip implantado en una de las aves
Los cóndores de la zona austral serán protegidos mediante un plan
Las montañas de los cantones azuayos de Nabón y Oñase han convertido en refugio de una familia de ocho cóndores. 6 de ellos fueron vistos el jueves anterior, causando revuelo en estas localidades. En la actualidad se trabaja en un plan de manejo de la zona para el cuidado de esta especie.
Llegar al sitio de refugio no es nada fácil, pues estos lugares carecen de un transporte permanente. Sus habitantesdisponen de una vía de acceso, pero la distancia les impide salir continuamente a Cuenca. Ellos se basan en su agricultura y ganadería. Caminar encima de los 2.600 metros sobre el nivel del mar no es problema, la dificultad está ensi hay buen clima para hacerlo y que no haya mucho viento para mirar a los cóndores que habitan en esta zona.
De pronto, la aparición de estas aves sobre las montañas fue avisada con un grito de alerta. Se divisa casi como un punto obscuro en el cielo azul, pero poco a poco se va acercando hasta distinguir su presencia. “Es un macho, porque tiene el cuello blanco”, señaló Raúl Pérez Valladares, quien agregó que hace algunos años en estos sectores había muchos cóndores, pero que poco a poco desaparecieron, ya sea por la falta de alimento o porque la gente los mataba, pensando que se robaban a sus animales.
En el cielo,el primer cóndor parecía hacer una especie de danza de bienvenida para los visitantes. Subía y bajaba, giraba en círculos sobre el cielo y de pronto estaba cerca de un peñasco, con una pendiente de más de 200 metros, donde muy pocos alcanzarían a llegar.
Allí apareció otro cóndor con el cuello blanco. Para los entendidos, era una hembra. “Tienen un nido o es un dormidero”, dijo Juan Astudillo, habitante de Nabón, quien fue parte deesta expedición por las montañas de Azuay.
Al poco tiempo de admirar a estas aves, se escuchó otro grito de alerta. No solo apareció un cóndor, ahora eran 6 los que volaban muy bajo sobre las montañas. El tiempo que permanecen sobre el sitio es muy corto.
Los 6 cóndores surcaban el espacio, daban vueltas y desaparecían en el infinito. “Ellos vuelan hasta 300 kilómetros al día”, indicó Astudillo. Además, explicó quea una de las aves hembra,llamada ‘Mary’ le fue implantado unchip, mediante el cual le hacen un seguimiento. “Tenemos información de que van hasta Colombia y regresan a este lugar”, indicó la alcaldesa de Nabón, Magali Quezada, quien también señaló que se ha iniciado un proceso de concienciación con los habitantes de estos lugares, que ahora son los encargados del cuidado. Se firmará una carta compromiso con las autoridades de Saraguro (Loja), Santa Isabel, Oñay Nabón,para iniciar un plan de acción que proteja a estas aves.
El biólogo Fernando Jueladijo que desde diciembre del año anterior, el Ministerio del Ambiente levanta información biológica de la zona. “Además, se trabaja en el diseño del esquema del plan de manejo del lugar”.
Para este trabajo se necesitan cerca de $ 15 mil, que serán financiados por el MAE y los cantones que conformanel consorcio para la protección del cóndor. El plan estaría listo en diciembre.
Al momento existen, aproximadamente, 50 cóndores libres y 19 en cautiverio en el país. El cóndor es miembro de la familia “Cathartidae o Catártidos”, palabra derivada del griego kathartes que significa ‘el que limpia’. Esto explica su función en el ambiente: controla las poblaciones de las especies. (I)