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La división de una calle causa discrepancias

La división de una calle causa discrepancias
10 de febrero de 2014 - 00:00

Los comerciantes que laboran en la calle Juan Jaramillo, de Cuenca, tienen criterios distintos en torno a la división de carriles que se dio el 30 de noviembre pasado.

Este hecho comprende la exclusividad de un espacio para buses y otro para vehículos livianos, lo cual impide la utilización de la acera derecha para parquear carros.

La mayoría de negociantes del sector se dedica al expendio de accesorios para automotores y, hasta antes de la fecha señalada, laboraron de manera normal, teniendo como posibilidad colocar los vehículos de sus clientes en ambas aceras. Sin embargo, tras la resolución de destinar un carril para los buses, se tomó la determinación de ejecutar, paralelamente, el Sistema de Parqueo Tarifado que es controlado por la Empresa Municipal de Movilidad (EMOV). Esto, según la mayoría de vendedores, ha causado una disminución de sus ingresos.

“Antes se vendían unos $ 80 diarios, pero ahora apenas $ 40 o $ 30”, manifestó Vinicio Atariguana, quien es propietario de un local de venta de accesorios, en Juan Jaramillo entre Vargas Machuca y Tomas Ordóñez.

Según este ciudadano, ahora que se controla el parqueo de los vehículos con las tarjetas prepago hay gente que labora en distintos lugares de la ciudad y dejan estacionados sus autos en las zonas que él y sus colegas requieren para atender a sus clientes.

Se redujo el espacio por la calle Juan Jaramillo, lo que dificulta vender a
los comerciantes.

“Como no hay dónde aparcar, porque tampoco podemos hacerlo en la otra vereda (acera) debido a que los agentes civiles multan a nuestros clientes, no podemos vender normalmente”, acotó.

Igual criterio tiene Rafael Pérez, propietario de una panadería ubicada en la misma calle, pero al costado derecho. Para él ha sido complicado poder expender sus productos, sobre todo a quienes llegan en sus autos, pues no encuentran lugar para parquearse. “Ni bien lo hacen por unos minutos a la derecha, ya llega el agente de tránsito en la moto y los multan”, comentó.

Para este panadero lo más factible sería que las autoridades del Municipio establezcan el método de estacionamiento batería (diagonal a 45 o 30 grados), para poder aumentar el espacio de estacionamiento de autos.

En cambio, Jorge Zúñiga, otro trabajador de la zona, está a favor del nuevo sistema. Manifestó que a raíz de la ejecución del carril exclusivo de buses y la implementación del Sistema de Parqueo Rotativo Tarifado, las ventas han crecido notablemente. “Antes ingresaban unos $ 50 diarios y ahora se venden unos $ 180”, indicó.

Fernando Lara, agente civil de tránsito de la EMOV, mencionó que, de a poco, la gente tiene conciencia de respetar el carril para buses y el otro para vehículos livianos.

Boris Palacios, director de la Unidad de Tránsito del Municipio de Cuenca, mencionó que para febrero se hará una evaluación según los estudios que se han realizado en la zona. Informó que en diciembre se realizó el primer control que dio resultados positivos.

“Se continúa en la fiscalización y control de la vía, con la intención de mejorar la rotación”, concluyó.

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