Las largas filas que formaron ciudadanos machaleños para adquirir cilindros de gas empezaron a disminuir desde ayer, tras varios días de desesperación por la escasez de bombonas en las distribuidoras de la ciudad.

Un funcionario de la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero (ARCH) supervisa en el camión repartidor la entrega de un tanque a cada familia en los sitios estratégicos de la capital orense donde se estaciona.

César Bravo, director de esta entidad, dijo que las personas se alarman por los rumores, pero desmintió que haya un déficit de este combustible en la región. “No escasea el gas, estamos entregando un cupo adicional para cubrir con la demanda”, señaló.

Mientras tanto, algunos jefes del hogar y amas de casa dijeron que en las distribuidoras se venden pocos cilindros y que no pueden conseguir uno. En Santa Rosa y Pasaje, el descontento de los ciudadanos trascendió a las redes sociales. Los consumidores expresaron que tenían dificultades para encontrar los cilindros en sus respectivos cantones.

Bravo explicó que, durante la época de frío, plantas avícolas y secadoras de granos adquieren una gran cantidad de tanques para usarlos en sus labores. Añadió que los dueños de esos negocios deben usar los cilindros industriales.

La comisaría de Policía y miembros de la ARCH visitaron varios de los sitios de expendio, como los ubicados en los sectores Arízaga y Junín, Manuel Estomba y Séptima norte, Marcel Laniado y Napoleón Mera, vía a La Puentecita, entre otros.

Allí se cercioraron de que los vehículos cumplan con los recorridos y la venta en los sectores suburbanos. El despacho -indicaron- debe darse conforme a lo planificado y que el GLP sea de acceso directo para la población de todos los estratos.

Asimismo, inspeccionaron en los locales de venta de comidas a fin de que esos establecimientos cuenten con bombonas industriales, tal y como lo establece la ley.

Según las autoridades de control, en las diferentes incursiones se ha detectado la mala utilización de gas de uso doméstico en restaurantes, locales de venta de pollo y lavandería.

La venta directa tiene como finalidad evitar el desabastecimiento y confirmar que se respete el precio oficial del cilindro, que es de $ 1,60.