En Azuay los conductores inmovilizaron sus unidades
A muchos azuayos el paro les tomó por sorpresa; a otros, el día les resultó complicado porque no tuvieron cómo trasladarse, en especial a los cantones y provincias del sur.
Desde las primeras horas de la mañana, tanto en la terminal terrestre de Cuenca, como en las vías de salida de la ciudad, los usuarios se instalaron para tomar un transporte, pero no lo consiguieron y debieron utilizar en unos casos taxis y en otros vehículos informales que aprovecharon las circunstancias para trabajar.
Teodoro Marín, director de la Agencia Nacional de Tránsito, dijo que la transportación interprovincial se paralizó desde Cuenca, mientras que la intercantonal no se detuvo en su totalidad, incluso manifestó que el transporte desde el cantón Paute hasta Gualaceo y el cantón Chordeleg se realizó sin mayor contratiempo.
En la Panamericana Sur, los buses interprovinciales y los que dan servicio a la provincia de El Oro se tomaron la vía; sus propietarios se ubicaron en un costado y dejaron de trabajar. “Estamos exigiendo que el gobierno cumpla con su ofrecimiento de cancelar la deuda pendiente”, dijo el transportista Roque Crespo.
Busetas que dan servicio a Guayaquil, Machala y Loja tuvieron que duplicar sus frecuencias para atender a cientos de usuarios. (I)