Hoy se cumple un mes del accidente de un avión de la aerolínea Tame, que el pasado 28 de abril perdió pista mientras aterrizaba en el aeropuerto Mariscal Lamar. La nave quedó en la cabecera sur, con la cola sobre un muro de la terminal aérea y a pocos metros de la avenida Núñez de Bonilla, una vía de alto tránsito vehicular. Hasta el momento la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) no ha emitido un informe sobre las causas que provocaron el percance con la aeronave, un Embraer 190 que provenía de Quito.

Fernando Arteaga, director de la Corporación Aeroportuaria de Cuenca (Corpac), explicó que en el Código Aeronáutico y las normas de la Aviación Civil no se establece una fecha límite para que la Junta Investigadora de Accidentes (JIA) presente un informe luego de ocurrido un incidente. “Es algo que nosotros no manejamos, ni está en nuestras competencias, pero sí está el insistir ante la autoridad de aeronavegación en la rapidez con que se pueda manejar ese informe, por todas las repercusiones que eso deriva”, dijo.

El director explicó que en esta semana 2 técnicos de la DGAC viajarán a Brasil para presenciar la apertura de la caja negra de la nave que salió de pista. “Casi un mes después se va a cumplir con ese protocolo, pero son cosas que no están bajo nuestro control”. De acuerdo con datos de la Corpac, diariamente unos 620 pasajeros salen desde Cuenca hasta Quito y Guayaquil y 580 llegan desde esas urbes.

Sin embargo luego del accidente las operaciones en el aeródromo no se desarrollan con normalidad. De acuerdo con una disposición de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), desde el 10 de mayo y hasta el próximo 11 de agosto de este año el campo de aviación no está disponible para operar en esas condiciones.

Esto ha generado que las 2 aerolíneas que dan servicio en Cuenca (Tame y Latam) hayan debido retrasar más de 19 vuelos. “La operación actual está restringida a una pista mojada, nosotros estamos cumpliendo con esa disposición”, dijo Manuel Van Oordt, director ejecutivo de Latam (antes Lan).

Van Oordt expresó que esta situación preocupa, por lo que esperan conocer pronto un plan para dar una solución definitiva a la limitación. Actualmente un equipo de técnicos de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), conjuntamente con profesionales del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) evalúan la pista del aeropuerto. “Al momento de existir una lluvia en el aeropuerto las 2 compañías que dan servicio no deben aterrizar, hasta que se realice una evaluación más profunda y un análisis más técnico sobre las condiciones de la pista, es decir de la carpeta asfáltica”, dijo Arteaga.

El funcionario, explicó que esto coincidió con que desde el 15 de diciembre y hasta el 4 de marzo se hizo una intervención para mejorar las condiciones de la carpeta asfáltica, producto de que se estaban generando desprendimientos de los agregados del asfalto al momento de un aterrizaje. Los trabajos, que consistieron en un ‘rejuvenecimiento’ de la pista y trabajos de bacheo, aún no han sido recibidos por la Corpac.

Arteaga explicó que actualmente los profesionales realizan mediciones de los niveles de la pista, “para corregir eventuales encharcamientos que se producen fruto de estos pequeños desniveles entre los baches que se han hecho por las intervenciones y otros que están a poca distancia”.

El alcalde Marcelo Cabrera señaló que los profesionales también analizan la última intervención realizada en la pista aérea y por este motivo participan el contratista y el fiscalizador. “Lo que les puedo asegurar es que en poquísimo tiempo se solucionará el tema de encharcamientos que este momento han dado lugar al Notam (emitido por la DGAC) que dice que cuando la pista esté mojada se eviten los aterrizajes”.

Según el director de la Corpac, la restricción por parte de la DGAC es una “medida extrema” para precautelar la seguridad de los usuarios y espera que en los siguientes 10 o 15 días, se restituya la capacidad operativa del aeropuerto. La mañana del lunes los concejales de Cuenca se reunieron en una sesión extraordinaria para conocer la situación técnico-operativa de la terminal aérea.

Los ediles mostraron su malestar por la falta de información por parte de la Corporación Aeroportuaria. “Por fin tenemos esta reunión... Existen muchas inquietudes con respecto al actual funcionamiento del aeropuerto”, dijo Marco Ávila.

La edil Gabriela Brito señaló que solicitaron información referente al plan de emergencia que cuenta la terminal aérea, sobre los últimos trabajos realizados, certificados sobre el índice de fricción de la pista, y otros documentos que nunca fueron entregados.

Sobre este tema, Arteaga aseguró que en aeronavegación se privilegia el tema de seguridad, sin embargo, acotó que mejorará el canal de comunicación con los concejales. En la sesión del concejo también se propuso la conformación de una comisión que dé seguimiento a todos los temas relacionados con la terminal aérea. (I)