Recordando sus dotes de carpintero, Marco Sánchez, director de la escuela Ciudad de Machala, ha fabricado hasta ahora sesenta pupitres para sus alumnos. Ello debido a que este año se incrementó el número de estudiantes.

Al ver que los alumnos no tenían dónde acomodarse, decidió coger sus herramientas y construirlas. “Me ha tocado dejar momentáneamente mis funciones de director y tomar el martillo, serrucho y otros implementos para elaborar las bancas”, dijo.

Añadió que, “fueron varias las llamadas y oficios que se ha enviado a la Dirección Distrital del Ministerio de Educación, sin embargo, no hubo respuesta”.

Hay profesores y padres de familias que voluntariamente se ofrecen para contribuir a armar los pupitres. Según Sánchez, la mayoría de los implementos utilizados en la elaboración sale de los bolsillos de ellos mismos.

La escuela que empezó clases el pasado lunes, obtuvo gran demanda, por lo que algunos  estudiantes tienen que acomodarse para escuchar las clases.

Hay progenitores que prefieren traer las bancas ya fabricadas. “Aquí traigo el pupitre para mi hija”, dijo el padre de familia John Aguilar, a la maestra de cuarto año de básica. Él compró el asiento en 40 dólares.

El director comentó que no es la primera vez que elabora pupitres para los estudiantes, desde hace cuatro años lo viene haciendo, ya que la demanda crece, debido a que aumentaron los paralelos de colegio, (8vo a 10mo).

“Hay padres de familia que voluntariamente vienen a ofrecerme las herramientas, ellos traen las tablas”, aseguró. Él heredó la práctica de la carpintería de su padre, quien tenía un taller. Desde joven trabajó en esa actividad, hasta que ejerció la docencia.

Sánchez, fue también Director Provincial de Educación, por ello prefirió ser parte de la solución y no del problema. “No podíamos esperar a que las autoridades manden los pupitres, decidimos hacerlo nosotros”, precisó.

El último jueves un funcionario del ministerio llegó a la escuela, para recoger información de lo que hacía falta en el centro. En el inventario se estableció que unos 250 pupitres necesita el establecimiento.