A pocas horas  de que inicie la peregrinación, miles de devotos de la Virgen del Cisne llegaron en las últimas horas a Loja,  para  iniciar la jornada mañana, a las 7:00, desde la parroquia rural.

Los feligreses recorrerán 20 kilómetros hasta llegar a San Pedro de la Bendita. De ahí  continuarán a Catamayo con una distancia de 15 km y luego a la ciudad de Loja, el trayecto más largo con 37 km.

Mientras que, los devotos que ya se encuentran en El Cisne aprovechan  su estancia para conocer más respecto a su patrona. Así, visitan el museo de arte religoso ubicado en el subterráneo de la Basílica de la Virgen del Cisne. En ese lugar  reposan reliquias, vestimentas,  sacros  y los recuerdos obsequiados por devotos de las provincias.

Una es Rosa Vargas, quien afirmó que es la primera vez que visita ese lugar a pesar de haber participado en otras peregrinaciones.

En el museo también se encuentran los agradecimientos de creyentes que provienen de Perú y Colombia. Este espacio posee cuatro salas: en la primera están los coloridos vestidos obsequiados por los devotos, en la  segunda  hay vitrinas dentro del corredor que contienen diversas joyas donadas por los peregrinos, en la otra se encuentran buses, camiones  y barcos en miniatura, entregados por creyentes que le piden  protección.

Además, resaltan innumerables nombres de cooperativas de transporte de pasajeros de  Tungurahua, Napo, Azuay, Morona Santiago, Zamora Chinchipe, Guayas y Manabí.

“El museo se ha podido construir con la generosidad de los devotos, ellos dejan los recuerdos, joyas y trajes típicos”, dijo William Arteaga, director de Pastoral de Comunicación de la Curia Diocesana.
La cuarta sala posee   pinturas de los siglos XVII y XVIII.