A la Dirección Regional del Ministerio del Ambiente (MAE) llegan  dos denuncias diarias sobre árboles que ponen en riesgo viviendas, escuelas y peatones.
En un estudio  realizado por la Empresa Municipal de Aseo (EMAC) y la cartera de Estado    se determinó que  en Cuenca existen alrededor de 832 árboles que están en riesgo por su  inclinación o por su antigüedad.

Esteban Torachi, director provincial del MAE en Azuay, expresó que estos    empezaron a ser talados, pero que en su momento un sector de la población estuvo  en contra y  realizaron cuestionamientos desde una perspectiva ecologista.

Por esta razón la EMAC  no pudo ejecutar los trabajos de prevención.
A inicios de este año  en la Panamericana Norte, en el sector Ucubamba, un eucalipto cayó sobre la vía, aplastando  un bus y dejando varios heridos. 

De igual manera, en el último mes dos más se han caído en diferentes zonas.
Uno   puso en riesgo la vida del conductor de un automóvil que circulaba por la avenida 24 de Mayo, cerca del puente Max Uhle.

Mientras que otro  estuvo cerca de caer sobre un vehículo que circulaba en la avenida Remigio Crespo Toral. 

“A mí  me llegan dos denuncias diarias, la mayoría de ellas  por el riesgo de   árboles viejos o inclinados. Las personas  tienen miedo de que se caigan en zonas habitadas. También hemos tenido pedidos de escuelas para que sean talados”, dijo Torachi.

El funcionario del MAE  añadió que si un árbol se cae y  causa  algún accidente  la responsabilidad es del Municipio, en este caso de la EMAC.

“Ellos tienen esa competencia, pero también  se ven un poco atados  porque cuando se los quiere cortar  la gente no los deja”, añadió.

El peligro por este tipo de percances  en la ciudad se presenta en varios sectores, entre ellos en la  Panamericana Norte (Ucubamba),  donde un gran número de eucaliptos están inclinados.
También  en la entrada de emergencia  del hospital Vicente Corral Moscoso y en las orillas de los ríos.

Ante esto, Pedro Salazar, jefe del departamento de áreas verdes de la EMAC, señaló que realizan  podas  de mantenimiento todo el año y que cuando son situaciones puntuales se efectúa el corte de inmediato.

“Específicamente en el caso de los eucaliptos de las orillas de los ríos, allí nosotros hacemos un mantenimiento de acuerdo con los árboles que presentan cierto riesgo”, explicó el funcionario municipal.

Salazar señaló que es complejo determinar si un árbol ha cumplido  su ciclo vegetativo.
Sin embargo determinó que en el caso de los eucaliptos de origen australiano, estos  tienen unos 60 años de vida, en relación a los  400 años que pueden vivir.

Sin acuerdos sobre el tema

En marzo de este año se conformó una comisión técnica para investigar el estado de los árboles  en riesgo de caerse.
El mismo   estuvo conformado por la Comisión de Gestión Ambiental, delegados del MAE,   la Comisión de Gestión de Riesgos del Municipio y otros grupos.

El concejal Carlos Orellana indicó que decidieron no talar los árboles mientras no  exista un sustento que garantice que el corte  es técnicamente adecuado.
Para ello determinaron contratar una consultoría.

Mientras que Esteban Torachi, del MAE, señaló que la comisión no  prosperó.
“Nos reunimos  un par de veces y no tengo ni idea de en qué quedó esto, porque  las reuniones solo terminaban en desacuerdos. Nunca se estableció ningún  objetivo y por eso simplemente ahí quedamos”, manifestó.   Ayer, en cambio, un árbol fue destruido en la entrada de un establecimiento de comida rápida que se levanta en Cuenca. El Municipio clausuró la construcción.