Centros deben estar a 1 km de sitios poblados
Para el funcionamiento legal de los camales de ganado vacuno, porcino y bovino, la infraestructura y el cuidado higiénico son fundamentales, según Bolívar Auquilla, encargado del proceso de vigilancia de esta clase de centros, en la regional del Ministerio de Salud.
El funcionario destaca que la ubicación del predio es uno de los puntos más importantes. Deben estar, por lo menos, un kilómetro alejados de lugares habitados. Asimismo, el lugar debe ser vigilado por un médico veterinario para que garantice el estado del animal antes y después de su muerte.
Las instalaciones tienen que garantizar la higiene en todo lo relacionado a infraestructura y en el cuidado de desechos sólidos y líquidos.
El personal encargado del faenamiento debe estar capacitado en utilizar técnicas que eviten el deceso doloroso del animal. Además, cada local debe contar con máquinas eléctricas para evitar que luego de la muerte del ganado tenga contacto con el piso.