Esmeraldas.-

Las calles de Esmeraldas, capital de la provincia del mismo nombre, están llenas de tanques vacíos. La falta de agua potable, problema recurrente en esta región del país, obligó a los ciudadanos a bloquear las vías con los recipientes para exigir el líquido vital.

“En mi sector llevamos 6 días consecutivos sin agua”, comentó Félix Segura, quien lamentó que los funcionarios públicos solo reaccionen cuando la población protesta.

Segura vive en la calle principal del barrio Nuevos Horizontes y en su casa son 8 personas, entre ellas 5 niños en edad escolar. “Tenemos tres tanques y usando el agua de forma restringida gastamos uno diario”, contó Segura, quien insistió en que los niños no pueden ir a la escuela y el negocio de comidas que sustenta está cerrado.

“Ayer, porque salimos a las calles, nos mandaron un tanquero, pero este para todo el barrio es poco, la mayoría de la gente se quedó sin agua”, contó el ciudadano.

Al igual que Félix Segura, Christian Prado Albán lamentó la situación que viven la capital esmeraldeña y los cantones vecinos Rioverde y Atacames, los cuales ayer declararon la emergencia sanitaria por la falta de agua potable.

Prado es miembro del Comité de Usuarios y Vigilancia del Sistema Regional de Agua Potable, veeduría que nació el pasado 16 de agosto con el aval del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS). Él afirmó que el norte de la ciudad, donde residen 58.000 personas, es el más afectado por la escasez de agua potable.

“La gente acá está reusando el líquido. El agua que usa para bañarse la recoge para echarle a los servicios higiénicos”, explicó.

Christian Prado reconoció que los tanqueros proveen agua a las escuelas y otras instituciones públicas, pero se preguntó “¿si en las casas no hay agua cómo los padres mandan a sus hijos a la escuela?”.

Ayer la empresa EAPA San Mateo, a través de un comunicado de prensa, informó que a las 23:00 del miércoles logró reiniciar el bombeo de agua. También comunicó que hasta el momento el sistema funciona 100%; sin embargo, la población de las riberas del río Esmeraldas y de barrios altos como El Coquito, Vista al Mar, El Panecillo, Chone Nuevo, no contaban con el servicio.

La tarde del miércoles unos 200 ciudadanos, con carteles en mano, realizaron una caminata de protesta, que partió desde el Parque Infantil hasta la Municipalidad de Esmeraldas, para exigir que se cumpla el derecho fundamental del acceso al agua potable.

Christian Prado, quien participó en el acto, se quejó, de la falta de socialización con la ciudadanía de los proyectos que cumple el sistema regional de agua de Esmeraldas.

Eduardo Orquera Delgado, quien trabaja en Muisne, se quejó también de la poca información sobre los recorridos de los tanqueros. “Ahora no tenemos una gota de agua, porque todos trabajamos y no pudimos llenar los tanques”, contó el hombre, quien siente incertidumbre porque no sabe qué va a pasar. En su casa residen 15 personas.

Ante la incertidumbre, la noche del  miércoles, los ciudadanos en los barrios bloquearon vías y gritaban consignas exigiendo el líquido vital. “No es posible, esto va de la negligencia al abuso”, dijo la abogada Yadira Lucas, residente de Nuevos Horizontes, quien también protestó porque los tanqueros no abastecen.

En Rioverde, en cambio, el alcalde, Armando Peña, pidió a la EAPA San Mateo la devolución de la planta procesadora de agua, porque “esa empresa ha demostrado que no la puede administrar”.

El funcionario agregó que no es posible que el Municipio pague energía eléctrica, químicos y trabajadores y que EAPA solo administre y no lo haga bien. (I)

La EAPA San Mateo informó que desde las 23:00 del miércoles la planta de bombeo funciona 100%. Sin embargo, los barrios del norte siguen sin agua. Foto: Cortesía Luis Freire / EL TELÉGRAFO