El último trimestre de cada año es considerado como una oportunidad económica para los comerciantes ecuatorianos, en Tulcán.

Un total de 1.670 negociantes se preparan para afrontar esta época con alta presencia de clientes.

Wiliam Segarra propietario de un local de venta de electrodomésticos, empezó a abastecer su almacén con artefactos de ensamblaje nacional.

“Vamos a dar impulso a las televisiones que se están ensamblando en el país como son las Riviera y TCL, ambas de buena calidad y un año de garantía”, aseveró. 

Lo mismo sucede en el Centro Comercial Popular y con los dueños de establecimientos de ropa y de calzado quienes esperan el arribo de nueva mercancía.

Luis Males, de esta plazoleta comercial, comentó que se están abasteciendo de prendas de vestir. “Estamos trayendo nuevos modelos para promocionar. Ofertamos más barato que en Colombia, siempre unos $ 5 menos”.

Para atraer al mayor número de compradores, la Municipalidad de Tulcán programó para noviembre y diciembre en los mercados de San Miguel y el Popular campañas como el ‘Viernes Negro’ y un desfile de modas. Estas y otras actividades tienen como fin promocionar productos de calidad y a bajos costos.

Marlón Ruales, comisario de Mercados de Tulcán, explicó que adicionalmente planifican una campaña denominada ‘el 50%’. El objetivo es que todo producto a partir de las 16:00 o 17:00 se venda a mitad de precio.

Bayardo Martínez, miembro de la Cámara de Comercio de Tulcán, considera que estas iniciativas atraerán al cliente local y del interior. Así también evitará que el ecuatoriano cruce a Colombia.

En la capital carchense hay cinco plazas comerciales y en dos de ellas ofertan prendas de vestir.

Todo este movimiento activó los  controles aduaneros cuyo objetivo es controlar la informalidad.

Marcelo Villacrés, director de la Unidad de Vigilancia Aduanera –Tulcán, sostuvo que se intensificaron los patrullajes con la presencia de 92 uniformados. Ellos permanecen a lo largo del cordón fronterizo. “55 de ellos están distribuidos en destacamentos en sectores de río Carchi, La Pintada, cerro Troya, Calle Larga y Urbina, el resto hace control en Rumichaca y Tufiño. Además hay personal  vestido de civil que hace un trabajo de inteligencia”, acotó. 

En el último operativo, la Aduana    decomisó 28 televisores, 5 consolas de videojuego, 26 teléfonos celulares, 28 batidoras y otros artículos que iban camuflados en un auto.

A estas gestiones también se incorporó personal de la Policía de Ecuador y Colombia.

René Almeida, comandante de la Subzona de Policía Carchi, declaró que este tipo de acciones conjuntas responden a un compromiso dentro de una programación de cooperación interinstitucional planificada con anticipación.

“La consigna de los operativos binacionales es evitar el contrabando”, aseveró.

Para Patricio Franco, agente operativo de la Unidad de Delitos Aduaneros y Tributarios, este tipo de acciones “están encaminadas a generar un impacto social, tanto en el lado ecuatoriano como  colombiano. Ello a través del trabajo conjunto de las instituciones encargadas de ambos países”, precisó. (I)