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El Telégrafo
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El colectivo Ibarra reacciona fiscaliza las acciones de la Municipalidad

El Alcalde de Ibarra es cuestionado por la compra de un terreno

El actual alcalde de Ibarra, Álvaro Castillo, del movimiento Avanza, asegura que la compra es totalmente legítima y minimiza los cuestionamientos de la oposición. Foto: Miguel Jiménez / El Telégrafo
El actual alcalde de Ibarra, Álvaro Castillo, del movimiento Avanza, asegura que la compra es totalmente legítima y minimiza los cuestionamientos de la oposición. Foto: Miguel Jiménez / El Telégrafo
18 de octubre de 2015 - 00:00 - Regional Norte

La adquisición de un terreno situado a 700 metros de donde se construirá el anillo vial en Ibarra, por parte del actual Alcalde, Álvaro Castillo, y varios funcionarios del Municipio ha generado críticas entre quienes conforman el colectivo Ibarra Reacciona.

Uno de sus miembros, José Moncayo, exvicealcalde de Ibarra, por el movimiento PAIS, compara a este colectivo con una suerte de Junta Cívica, un grupo fiscalizador que surgió hace más de 2 meses. El colectivo —precisa— se conformó tras constatar “las deficiencias de la administración actual”.

Actualmente, ese grupo está integrado por un grupo de ciudadanos, muchos de los cuales no pertenecen a PAIS. “Más que un grupo político es un grupo ciudadano que fiscaliza las acciones del actual Alcalde”.

Según José Moncayo, quien también se desempeñó como concejal en la administración anterior, el Alcalde y varios funcionarios municipales adquirieron un terreno de alrededor de 55.000 m² en aproximadamente $ 350 mil cerca del anillo vial que Álvaro Castillo tiene previsto construir.

El Exvicealcalde afirma, además, que el terreno que adquirieron se convierte en un sitio de influencia por la construcción que se realizará con los recursos de todos los ibarreños. “Como abogado que soy puedo decir que se configura un delito de tráfico de influencias, tipificado en el artículo 285 del Código Penal. Es antiético que el Alcalde y los funcionarios municipales se organicen para comprar un terreno en $ 6 el metro y luego pretender venderlo en $ 60 el metro”.

Lo que más le molesta a Moncayo es que el Alcalde no brinde una respuesta argumentada. “Simplemente dice que él no está prohibido de hacer negocios personales”.

DATOS

La Vicealcaldesa de Ibarra asegura que con su sueldo paga a su asistente, a su secretaria y su movilización. Todo corre ahora por su cuenta.  

Andrea Scacco
fue desalojada de su despacho. “Sin estar presente, un viernes en la noche, sacaron mis pertenencias y las ubicaron en la bodega, todas revueltas en el piso. A mí me ubicaron en la bodega”.

A este hecho, Scacco
lo califica como un gesto totalmente descortés. “No es posible dejar pasar este tipo de hechos. Ahora ocupo la bodega y mi oficina está localizada en la calle Sucre y Grijalva”.

Esta funcionaria
, al igual que muchos concejales, espera ocupar en los próximos días el espacio donde antes funcionaban las oficinas de los concejales y que ahora está remodelado. Mientras tanto, Scacco permanece en la calle Sucre.
Ante estas acusaciones, el alcalde Álvaro Castillo, quien pertenece al movimiento Avanza, afirma: “Cómo vayamos a utilizar el terreno es un tema privado; es un tema nuestro. Son fondos privados, es nuestra vida privada y nosotros sabremos lo que haremos exactamente con esa propiedad, ahora, más tarde o después de mucho tiempo”, recalca el alcalde, indignado.

El terreno adquirido —indica— está localizado a 700 metros del anillo vial, un proyecto que, según él, se concibió hace 30 años, pero hasta ahora ninguna administración municipal lo ha ejecutado. Según explica, él y sus colaboradores se encargarán de llevarlo a cabo.

“Nosotros, gracias al apoyo incansable del Gobierno, tenemos varios créditos nacionales e internacionales y este anillo vial será realidad en 2 a 4 años. Primero iniciaremos con la etapa norte que son 120 kilómetros y cuyo costo asciende a $ 25 millones”.

Al explicar cómo adquirió el terreno, dice que hace 10 meses el Fondo de Cesantía de la Universidad Técnica del Norte (UTN) publicó durante 5 días consecutivos la intención de rematar un terreno.

Esta publicación fue conocida por Arturo Fuentes, gerente de la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Ibarra. Este funcionario, según afirma Castillo, realizó la oferta de compra a la Universidad.

Su propuesta y la de 3 empresas más fueron entregadas en sobre cerrado. “Tras la apertura de los sobres, ganó la oferta del ingeniero Arturo Fuentes, porque fue la más alta. Finalmente, le adjudicaron la adquisición del terreno”.

Fuentes, según las propias palabras de Castillo, es un constructor de viviendas en Ibarra. Tras ganar la oferta de compra, Fuentes se reunió con el Alcalde y otros funcionarios municipales.

“Yo me reúno todos los días lunes con mis directores departamentales, con mis gerentes. Allí Arturo nos comentó este antecedente. Nos dijo que él pensaba desarrollar en ese terreno algún programa de vivienda o alguna actividad y varios de nuestros empleados municipales le preguntan al ingeniero si había la posibilidad de ser socio de la compra de este terreno y él nos dijo que sí. Al final del cuento, nos unimos 12 personas para comprarlo”.

Esta adquisición que el Alcalde de Ibarra considera totalmente legítima también es criticada por la actual vicealcaldesa de la ciudad, Andrea Scacco, quien considera que esta compra es antiética.

“En el Municipio de Ibarra tenemos un código de ética. En uno de los literales se explica de manera clara que está prohibido para nosotros —como funcionarios— hacer cualquier tipo de compra, transacción o movimiento económico que pueda poner en riesgo el buen nombre del Cabildo”.

Basados en este Código de Ética, aprobado por el Alcalde en la administración anterior y que está vigencia, Scacco hizo un llamado de atención para dar a conocer que este tipo de acciones no son correctas. “Yo no hablo de la legalidad o ilegalidad de la compra, porque eso lo determina la autoridad competente, pero en mi calidad de fiscalizadora y con los documentos, puedo asegurar que se trata de un acto que deja mucho que desear. La Vicealcaldesa indica que hace varios meses decidió renunciar a Avanza, porque tuvo conocimiento de algunas irregularidades que se están dando en el Municipio de Ibarra. “Lo más lógico que debe hacer una persona honesta es separarse. Ahora soy independiente totalmente”.

La funcionaria descarta afiliarse a algún partido político. Su objetivo —insiste-— es continuar trabajando por la ciudad, aun cuando ya no pertenezca a Avanza. (I)

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