Desde agosto de 2014 se han valorado a 6.772 personas
Programa mejoró calidad de vida de pacientes con úlcera en el pie diabético
Las diversas recomendaciones que recibió el mantense Pedro Cedeño sobre el programa que brinda atención integral a pacientes con úlcera en el pie diabético, en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social en Manta, le llamaron mucho la atención.
No dudó en incluirse y es uno de los 6.772 pacientes que han sido valorados dentro de este programa que usa tecnología avanzada, a través del Heberprot-P (medicamento elaborado a base del Factor de Crecimiento Epidérmico Humano que permite regenerar las lesiones en el pie por la diabetes).
Hace un mes, él se incluyó entre los pacientes y llegó acompañado de su hijo Javier Cedeño.
Su primera cita coincidió con la llegada de delegados del Ministerio de Salud Pública de Cuba y del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, los que evaluaron el programa de atención integral al paciente con úlcera del pie diabético (UPC), con el uso del medicamento.
Julia Ávila, quien habita en la zona rural de Manta, habló sobre lo que ha observado dentro de la atención que dan los médicos cubanos. A ella le tocó llevar a su sobrino, Ramón Ávila, a la consulta. Comentó que la vida de su familiar cambió. Valoraciones hechas por otros médicos concluían en que se le debía amputar el pie.
“Escuché del nuevo programa en la radio y me acerqué al IESS. Al siguiente día me presenté con mi sobrino y con la asistencia recibida la llaga que tenía en el pie ha disminuido, está pequeña”, explicó la mujer, quien se siente agradecida con el convenio firmado entre el Gobierno Nacional y Cuba, lo que permitió que esos profesionales estén en Manta.
Erick Hernández, coordinador nacional del programa, explicó que mediante el convenio de cooperación estos profesionales están presentes en 5 provincias del Ecuador: Esmeraldas, Santo Domingo, Los Ríos, El Oro y Manabí.
Hay un equipo de 5 profesionales de la salud en cada lugar, lo que incluye un especialista en cirugía vascular y angiología que, junto con el licenciado en enfermería, asiste a los pacientes que ya tienen la complicación de úlcera en el pie diabético. Hernández refirió que el medicamento evita, en muchos casos, la amputación.
De un total de 230 lesiones ha sido dado de alta, cicatrizado totalmente el 83%.
Julio Álvarez, funcionario del nosocomio del IESS en Manta, indicó que este acuerdo, en conjunto con la cooperación cubana, funciona desde agosto de 2014 y está brindando atención al paciente para una recuperación oportuna de la diabetes en su pie al ser afectado. “Se han dado más de 7 mil atenciones y ha habido muchos casos de recuperación. Ellos no vienen a cortar, sino a curar”, señaló.
Oswaldo Reyes, coordinador del programa nacional de Cuba de atención integral al paciente diabético, expresó: “Se ha avanzado desde un inicio con la implementación de este plan, usando tecnología nueva, para una enfermedad que no tenía un enfoque terapéutico efectivo en el país y, por lo tanto, todos los planteamientos que se requerían para la parte organizativa, para la parte de ejecutar un programa como tal, necesitaban ser nuevos”.
El especialista destacó además que “Cuba fue el laboratorio de experimento y esta experiencia la tratamos de transmitir a países donde se ha implementado el programa. En Ecuador se lo ha ejecutado en forma de convenio con el Ministerio de Salud Pública desde 2012 y por parte del IESS comenzó desde agosto de 2014”.
El medicamento llega a los pacientes de manera gratuita. Enrique Fernández, representante del sector de la biotecnología y la industria farmacéutica cubana en el Ecuador, dijo que el medicamento aplicado a pacientes con pie diabético es un preparado farmacéutico que, básicamente, previene las amputaciones a partir de un factor de crecimiento cuya preparación está reconocida, y cumple con altos estándares de calidad y de buenas prácticas de fabricación”.
Con la denominada clasificación de Wagner, los médicos analizan la evolución de la aparición de úlceras en el pie diabético.
El grado 1 tiene una úlcera superficial que compromete todo el espesor de la piel, pero no tejidos subyacentes; en el grado 2 se presenta una úlcera profunda, penetrando hasta ligamentos y músculos, pero no compromete el hueso.
En el grado 3, la úlcera es profunda; en el grado 4 se presenta la gangrena localizada; y en la etapa 5, la gangrena extensa compromete todo el pie. (I)