Entre sus agitados días, Jorge Zambrano agenda un espacio para montarse en su lancha y entrenar para lo que será la tradicional regata Pichincha-Balzar-Pichincha, que se realiza hoy.

Desde hace 20 años que Zambrano compite en la carrera Tomás Suárez Navarro. Este pichinchano, que parte de su vida la ha dedicado a la mecánica de motores fuera de borda, cuenta que a los 17 años nació su afición por los botes y que tras su primera carrera, sabía que vendrían muchas más.

Está previsto que la competencia inicie a las 11:00. Hasta el momento hay 30 participantes inscritos.

Como Jorge, Winston Almeida es otro de los participantes fijos. Él lleva 6 años corriendo la regata, que es muy esperada por los habitantes de Pichincha y sus alrededores, ya que se realiza una fiesta popular con motivo de la justa deportiva.

“Como competidor de Pichincha, espero ganar, si no que sea uno de mis compañeros, para que el título se quede en casa”, expresa Winston con respecto a la carrera, que se realiza en su edición 48.

Jesús Sánchez es otro competidor. Para él la travesía no es fácil. “Hay muchos obstáculos en el camino, se debe tener equilibrio y una buena técnica para maniobrar el bote y de esta manera no naufragar”, señala.

Esta es una competencia náutica que se desarrolla en el río Daule, en el tramo Pichincha-Balzar-Pichincha, en botes de madera con brea, en las categorías 25HP y 40HP; en la cual se puede presenciar también la exhibición de chancletas y motos acuáticas.

A la cita llegan participantes desde diferentes lugares de la geografía nacional, como Quinindé, Borbor, Quevedo, Daule, Manta, Laurel, Balzar y Junquillar. El momento de la premiación es uno de los más esperados, tanto por competidores como para quienes presenciaron la justa.

Tras la entrega de trofeos, empieza el baile popular, que dura todo el día. Se realizan presentaciones artísticas, en las que se da espacio a los talentos locales.

La tradicional regata se inició en 1968 bajo la coordinación de la Liga Deportiva Parroquial, presidida en aquel entonces por Milton Menoscal. Participaron canoas con motores de 25 y 40 caballos de fuerza.

A partir de 1976 la posta de la organización la tomó la Asociación de Pichinchanos Residentes en Guayaquil, que la presidía el exalcalde del cantón, Álex Intriago. La realización de la regata bajo esta organización duró hasta 1986. Luego pasó a manos del Club Náutico Pichincha, que en ese entonces era presidido por Bienvenido Sabando.

A lo largo de los 48 años se registran nombres de grandes corredores como Amado Montalván, Milton Ganchozo, Manuel Antón, Tomás Suárez Navarro, Tomás Briones, Washington Giler (actual vicealcalde de cantón), Yimmy Zambrano y Bienvenido Sabando, entre otros.

La regata Pichincha–Balzar–Pichincha lleva el nombre de Tomás Suárez Navarro en honor a uno de los primeros corredores, que falleció en un accidente.

Desde su primera edición, la carrera se celebra en la Semana Santa, el Sábado de Gloria. Es una forma de darle gracias a Dios por las bendiciones recibidas, según la tradición de los fundadores de la justa.

Potencia turística

El Municipio de Pichincha promociona la carrera como una opción para los turistas, para que así conozcan las tradiciones locales. Además invita a los visitantes a que conozcan los diversos balnearios de agua dulce de la zona rural.

En la cabecera cantonal está la cascada de Bellavista. El turista Marlon Vera resalta que acude en sus vacaciones hasta el lugar porque “tiene aguas cristalinas y sus saltos son relajantes”.

Para acceder al lugar se dirige sobre la vía hacia Portoviejo, frente a la Unidad Educativa Miguel de Cervantes, donde podrá dejar los vehículos parqueados y luego caminar para disfrutar de este paraíso natural. También está el balneario de Las Coronas, por el ingreso a Balarezo y Solanillo.

Quienes van hasta Bolívar podrían parar su recorrido para disfrutar de las cascadas y las pozas de Las Minas.
 Pichincha es un cantón eminentemente agrícola, que se sitúa a orillas del caudaloso río Daule. (I)