Con un entrecortado español, marcado por su acento alemán y con frases que le salen en inglés, el turista Lothar Shiltost destaca las cualidades de Manta como ciudad. Cuenta que hace pocos meses estuvo en Estados Unidos y que este país no se compara con las maravillas que ha visto en Ecuador.

Antes de arribar al puerto manabita, Shiltost buscó en Internet qué ofrece turísticamente Ecuador y quedó encantado. “De seguro volveré para ir a Quito, Galápagos, Guayaquil y Baños, también volveré a Manta”, lanza este alemán que está radicado hace más de 32 años en Australia.

Él es uno de los 2 mil visitantes que arribaron a Manta en el último navío de la temporada de cruceros 2014-2015. Viste una camiseta blanca, con una pantaloneta caqui, zapatillas y un sombrero de paja toquilla que acaba de adquirir.

Con su cámara fotográfica, Shiltost saca instantáneas de las artesanías que se venden en la Plaza Cívica, en la feria que instaló el Departamento de Turismo Local con motivo del arribo del crucero ‘Sea Princess’, la última embarcación de las 21 de la temporada.

“Es mi primera visita en Manta y me ha gustado mucho. Ecuador me ha gustado mucho más que Estados Unidos, porque allá todos viven en un mundo muy agitado, acá todo es más tranquilo”, dice.

El hombre de más de 1,90 metros de estatura mira el malecón Jaime Chávez y resalta la belleza de la playa mantense. “Ojalá pueda meterme un rato”, manifiesta.

En el crucero, en su gran mayoría, son parejas de australianos (el ‘Sea Princess’ partió del país oceánico) ya jubilados que han salido de viaje por el mundo para vacacionar.

Colling Evans camina junto a su esposa Erika en búsqueda de regalos para sus hijos. “Fuimos al centro comercial, que es muy bonito, pero encontramos pocas cosas para llevar. Aquí (en la feria), esperamos comprar más”, expresa.

Previamente, esta pareja, junto a un grupo de turistas, estuvo en La Pila viendo cómo se elaboran los sombreros de paja toquilla.

Mientras la mayoría de los visitantes presentes observan las artesanías, Rob Mack se refresca con una gaseosa. Cuenta que se siente como en casa, ya que el clima en Sídney es muy similar al de Manta. “La diferencia es que allá la humedad es un poco más alta. Pero en sí, Manta es muy parecido a mi país, me siento muy cómodo aquí”, dice. La temperatura en Australia es similar a la que hay en Manta, con un aproximado de 26 °C.

Otras de las personas que viven en Sídney son la italiana Katherine Sampieri y su esposo Silvio. “Nosotros somos de Venecia, pero nos gusta mucho Sídney para vivir. Algo que puedo rescatar de Manta es que las personas son muy abiertas, muy carismáticas”, comenta.

Mientras espera para subir al bus y seguir con su recorrido, Nain Lesnar, una mujer de 72 años, que ya recorrió la feria y que tiene como destino inmediato conocer Montecristi, cuenta que tratará de comprar “un Panama hat (sombrero de paja toquilla)”.

Cathy Sabando, organizadora de la feria, comenta que en total 800 turistas son los que visitan los estands de las artesanías, ya que el resto se divide en grupos y se va por diferentes sitios.

“Se van a Montecristi, Pacoche, la Isla de la Plata, Machalilla, La Pila. Hay grupos que toman un vuelo chárter y se van a Quito, Galápagos o Cuenca por unas horas”, dice la funcionaria del Departamento de Turismo del GAD de Manta.

Para los viajeros que quieran dejar el grupo y emprender el viaje por las localidades cercanas de la ‘ciudad puerto’, hay un grupo de taxistas que está en los alrededores de la Plaza Cívica para movilizarlos.

“Los taxistas han recibido clases de inglés, al igual que los artesanos y personal que atiende en los restaurantes, todo para darle la mejor de las atenciones a los turistas”, acota Sabando.

En caso de que algún comerciante tenga problemas por el idioma, en la feria hay estudiantes de las academias de inglés Oxford y Copei, quienes cumplen la función de traductores de manera gratuita.

Una temporada productiva

Según datos del Departamento de Turismo del Municipio de Manta, esta temporada de cruceros dejó a la ciudad alrededor de $ 150 mil.

“La presencia de los turistas va generando ingresos a la ciudad, en compra de artesanías, de comida y demás. Las personas que conocen Manta a través de estos cruceros promocionan la ciudad y el país ante sus familiares y amigos”, manifestó Andrea Zambrano, directora de turismo local.

Con el ‘Sea Princess’ (que estuvo en la ‘ciudad puerto’ el pasado 6 de agosto) son 21 los buques que han llegado desde el 19 de octubre de 2014, con un total de 19.604 pasajeros y 9.855 tripulantes, de acuerdo con los registros de la Dirección de Gestión de Operaciones de Autoridad Portuaria de Manta.

Para la temporada 2015-2016, que iniciará el 17 de octubre, está previsto que lleguen a Manta 22 embarcaciones. (I)