El 24 de noviembre de 2015 es una fecha que muchos chonenses recordarán. Aquel fue el día en que se inauguró una megaobra esperada por cerca de 3 décadas, como es el Proyecto Multipropósito Chone (PMCH), construido en el sector Río Grande. La estructura favorece ya a miles de personas de la zona centro de Manabí.

Son 3 los objetivos fundamentales que cumple esta iniciativa: evitar las inundaciones en más de 10.700 hectáreas, garantizar el suministro de agua potable y regar casi 3 mil hectáreas de cultivos.

La obra emblemática beneficia a 125 mil habitantes de los sectores Santa Rita, San Antonio, San Andrés, Los Almendros, Ricaurte, El Bejuco, El Pueblito y la Tablada de Sánchez del cantón.

El multipropósito fue inaugurado por el presidente de la República, Rafael Correa, quien recordó que este proyecto se enfrentó a la oposición de un grupo minoritario que decía que era una obra asesina, lo cual es realmente sin sentido, resaltó.

Previo a la construcción de este embalse, en Chone había pérdidas cercanas a los $ 20 millones por año, como consecuencia de las inundaciones del invierno. Jesús Zambrano, representante de las comunidades beneficiarias del multipropósito, recuerda que desde que tenía uso de razón se hablaba del proyecto. “En cada invierno nos quejábamos de las pérdidas, sin embargo los años pasaban y los gobiernos no se atrevían a hacer nada por nosotros. La mayoría de las personas emigraba porque en el cantón no había las garantías para invertir. Una cosa es contarla ahora y otra vivirla en carne propia”, refiere.

Uno de los peores temporales fue el de 1998, con la presencia del fenómeno de El Niño, cuando localidades como Río Grande, San Andrés, El Mate, El Paval y hasta llegar a Chone fueron afectadas con el paso del río Grande. En aquella época, la carretera quedó inútil, no se veía, porque el agua la sobrepasaba. Había casas de las que solo aparecía el techo. En el centro de Chone, la ciudadanía estaba con el agua arriba de la cintura.

“Era imposible llegar a la ciudad, solo se veían canoas y balsas. Lo más terrible ocurría después de que pasaban las grandes inundaciones. Entre las secuelas que quedaban estaban el lodazal, las enfermedades que aparecían y los negocios quebraban, en conclusión se veía pobreza”, destaca.

Los agricultores quedaron endeudados, porque las plantaciones fracasaron; se perdieron sembríos de arroz, maíz, plátano, papaya, café, mandarina y naranja, entre otros; se perdió ganado porque el pasto quedó enterrado. Los granjeros de San Andrés resultaron afectados; allí se veían montones de gallinas levantadas en volquetas. Las pérdidas fueron incalculables.

Una de las últimas crecidas del río Grande fue en marzo de 2013, cuando la localidad fue declarada en estado de emergencia por los graves estragos del invierno. El cantón se quedó 12 horas sin energía eléctrica porque las subestaciones se inundaron; 45 de los 75 barrios resultaron afectados. La sequía también los afectó en octubre, noviembre y diciembre, cuando las plantas y los animales murieron por falta del líquido vital.

“Gracias a Dios y a la voluntad de este Gobierno podemos decir que esta obra ya es una realidad, que traerá futuro y esperanza para quienes vivimos en el cantón Chone y sus alrededores, porque primero se podrá controlar la fuerza de río Grande, lo que quiere decir que no habrá más inundaciones y si hubiese serán pequeñas, sin mayores consecuencias. Tendremos reservas de agua permanente, tanto para el consumo humano como para los animales y las plantas, utilizando los sistemas de riego. Mejorará nuestra economía y forma de vida”, explica.

Zambrano resalta que los chonenses ya comienzan a ver los cambios positivos, como el mejoramiento de la comercialización de la mandarina, fruta de la cual el cantón es el mayor productor.

Desde 2010, el Gobierno inició la construcción de este megaproyecto, que tuvo una inversión de $ 80 millones. El Multipropósito Chone controlará la crecida del río Grande, evitando estragos y pérdidas materiales para la población de Santa Rita, San Antonio, San Pablo, Los Almendros, El Bejuco, El Mosquito, Garrapata, Ricaurte, La Estrella, El Pueblito, San Andrés, El Guabal, Lua y Tablada de Sánchez.

Está compuesto por 4 áreas: la presa Río Grande, un túnel de desagüe de fondo, túnel para captación de agua potable y riego y toma flotante. La presa que se construyó almacena hasta 113 millones de metros cúbicos de agua, mientras que el túnel de desagüe —de 254 metros de longitud— permite desembalsar el agua cuando las condiciones lo requieran.

La constructora que llevó a cabo la obra, desde mayo de 2013 (la inició en 2010 la empresa china Tiesiju —cesada por incumplimiento de contrato) fue la ecuatoriana Equitesa-Equitransa que dio cabida a 900 obreros, en su mayoría manabitas. El proyecto Multipropósito Chone también incluyó obras como la Comunidad del Milenio: La Tablada de Sánchez que la habitan 410 ciudadanos que residían anteriormente en la zona de Río Grande. En este complejo habitacional se construyeron 72 casas de 2 plantas y 9 de una planta (que habitan familias cuyos integrantes tienen algún tipo de discapacidad) que suman un total de 81 viviendas con un costo de $ 9 millones. En el lugar se edificó la Unidad Educativa del Milenio Carlos María Castro, que tuvo un costo aproximado de $ 4 millones. La entidad acoge a 570 estudiantes por jornada. Otra obra, parte del programa de inversión social del Sistema Multipropósito Chone es el nuevo cementerio La Arabia. (I)

Por: Mario Rodríguez