Publicidad

Ecuador, 22 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

La diversidad manaba está reunida en 40 km

Además de vender tortillas de maíz en Sancán, Jorge Seguiche también ofrece a los turistas maduros con queso. Es una de las pocas personas que comercializan este producto. Foto: Rodolfo Párraga / El Telégrafo
Además de vender tortillas de maíz en Sancán, Jorge Seguiche también ofrece a los turistas maduros con queso. Es una de las pocas personas que comercializan este producto. Foto: Rodolfo Párraga / El Telégrafo
11 de octubre de 2015 - 00:00

El trayecto de David Cárdenas es largo. El guayaquileño viaja en un camión junto a 2 compañeros. De  regreso a su ciudad, después de haber estado en Manta, mientras comparte sus experiencias en la jornada, está pendiente de llegar a Sancán, en Jipijapa.

A lo lejos ve franelas flamear en manos de comerciantes que intentan persuadir a los viajeros para  que les compren sus productos. El vehículo detiene la marcha y David se baja al local de Jorge Seguiche. Pide las tradicionales tortillas de maíz y de yuca, que son el atractivo en esta jurisdicción, las que saborea con todo gusto.

Además compra maduro con queso y maní, un bocadillo que Seguiche ha implementado en su negocio desde hace 4 años para atraer a más clientes.

Luego de unos minutos de haber complacido su paladar, David y sus compañeros siguen con el recorrido.  Esta localidad, conocida como la capital de la tortilla de maíz, tiene más de 60 comerciantes que se dedican aeste negocio en la vía.    

Desde la madrugada, el olor de las tortillas se expande en el sitio mientras se las prepara. A las 06:00, cabañas como la Cafetería Luis Mario ya está con clientela. Este es el negocio de los hermanos Guillermo y Ángel Pilay, que atienden hasta las 18:00, hora en que cierran para al siguiente día seguir con la misma jornada.

Ángel explica que en cada lata del horno entran 54 tortillas. Al día hacen entre 7 y 8 latas “depende del día”, refiere.

En esta localidad, familias como la Pilay cultivan el maíz en invierno. En verano lo secan y luego proceden a rallarlo, para hacer las tortillas. Para la masa de yuca, compran la materia prima.

“Nosotros vendemos una tortilla a $ 0,35 o 3 por $ 1”, asegura. Ese es el valor que se mantiene en todos los locales.  

El viajero escoge su local favorito, dependiendo del sabor de la tortilla que tiene cada puesto.

Este negocio es una tradición en la localidad, que ha venido de generación en generación, como narra Jessenia Rodríguez, quien aprendió el oficio de su madre. A las 05:30 de cada día está despierta ya preparando las tortillas. Ya son 10 años los que esta mujer jipijapense lleva preparando estos bocadillos.

“Hay días buenos en que vendemos hasta 8 latas de tortillas (432 en total). Los días con mayor acogida son los sábados y domingos, así comolos feriados”, comenta la mujer, que no suelta la franela con la cual llama a los clientes. Ella sirve el producto con café, agua o cola, “es como prefiera el cliente”, dice.

Jacqueline Rodríguez, oriunda de la localidad, asegura que en el lugar la competencia no existe porque “Dios da para todos”. Afirma también que en su puesto, como en el de los más de 50 comerciantes los clientes paran para comprar su producto. La mujer, que tiene 8 meses de embarazo, aprendió la labor de su padre, Daniel Rodríguez. Ella prepara tortillas de queso o de chicharrón.

La miel endulza a los viajeros

La miel de abeja es un producto que también se vende en este trayecto de 40 kilómetros entre Montecristi y Jipijapa o viceversa. Se la adquiere en el recinto Quimís, una localidad que pasó de ser un punto agrícola a tierra deapicultores.

Allí, a una distancia de 300 metros, se observan mesas cerca del asfalto exhibiendo la miel en botellas de vidrio recicladas.

Doña María Elena Quimís es una de las comerciantes. Ellatiene recipientes que van desde los $ 3 hasta los $ 12. Solo vende la miel silvestre, ya que la agria o de tierra la expenden otros familiares.

“El producto se lo encuentra en las montañas”, detalla la mujer, que asegura que “la miel es pura, no se la rebaja, porque la idea es tener más y más clientes”.  Sugiere al visitante que para identificar una miel pura es sencillo. “Si se ve asentada está mezclada”, refiere.

En charla con una turista, le indicaba que la miel no se daña. Explica que es mejor tenerla atemperatura ambiente, pues si la mete a la refrigeradora pierde las proteínas.  

“La miel de abeja en sí es vitamina para el cerebro y buena para las amígdalas. Yo la consumo y me siento muy bien, aprovecho sus propiedades”, destaca la mujer, que además ha implementado en su local venta de agua.

En la comunidad hay más de 20 negocios de venta de miel, que se instalan de 07:00 a 18:00.

Al lado de María Elena está el comercio de Gardenia Pincay, una joven de 23 años. Explica que tanto la miel silvestre como la agria tienen mucha salida. “La agria es cara, porque se la encuentra a 2 o 3 metros bajo tierra... es muy costosa”, expresa.

A pocos pasos está la venta de agua de coco y de palo santo. Marisol Rodríguez asegura que en una jornada laboral vende entre 10 y 15 vasos, según como esté el día, si soleado o nublado. Esta alternativa se  implementó hace 3 años. El palo santo es otro ingreso para ella, como para los demás comerciantes. Ambos productos se venden a $ 1.

La alfarería está en La Pila

Llegando a la parroquia La Pila, de Montecristi, la turista Nerexi Saltos desciende de su automóvil para observar las artesanías, pregunta por precios hasta encontrar lo que busca, un florero para su sala.

En su recorrido, Saltos queda cautivada por artesaníascomo las réplicas precolombinasy las piezastalladas por comuneros. Le agrada la atención que recibe. Los habitantes de esta localidadse dedican, en su mayoría, a la elaboración y comercialización de las artesanías.

Jhonny Muentes, artesano, detalla que en el lugar hay más de 30 locales. Las piezas van desde los $ 5 en adelante.(I)

Datos

La localidad de Sancán está ubicada a 10 minutos del centro de Jipijapa. El olor a maíz y yuca  seduce a todos los turistas que pasan por el sector.

Esta actividad comercial, que se realiza a diario desde las 05:30 hasta las 18:00, complementa los trabajos agrícolas de sus habitantes, pues Sancán es conocido por ser una tierra productora de maíz.

A lo largo de la carretera se observan pequeños hornos, en cuya lata se cocinan las tortillas que quedan listas a la espera de que lleguen los comensales dispuestos a saborearlas.

En Quimís de Jipijapa, ubicado en la carretera principal entre Manabí y Guayas, se exhiben en mesas cientos de frascos con miel de abeja, tanto silvestre como agria. Se las embotella en envases reciclados.  

En esta localidad se oferta diversidad de productos, pues se incluye el palo santo que con la miel poseen poderes curativos naturales. Además se implementó la venta de agua de coco en la vía para calmar la sed de los viajeros.

Además, en Quimís todos están capacitados para ser apicultores, dice María Quimís. Ella comenta también que la miel que se produce en su localidad es “pura y silvestre”. El producto no solo es requerido por su sabor, sino por sus propiedades para tratar enfermedades respiratorias.

La miel es un producto que las abejas producen a partir de la transformación del néctar de las flores, y es usado con propósitos de alimentación completa en la colmena.

En La Pila de Montecristi destaca la habilidad de la cerámica. Las artesanías son exportadas a distintas partes.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media