Actualmente se realizan instalaciones eléctricas en el sector para que las soluciones habitacionales sean ocupadas
Juana ya tiene casa propia, luego del 16-A
Juana Mero dejará de arrendar. Ella conoció ayer la casa que pronto habitará en el sector Ceibo Renacer, en Manta. Ingresó, observó los espacios, incluso pensó en cómo podría instalar una tienda en el sitio para reactivar su economía.
Mientras miraba, se le acercó Richard Hall, presidente de la Cámara de Comercio Ecuatoriana-Chilena, a quien le dijo que estaba bonita la vivienda, que fue donada (con otras 79) al Municipio de Manta por parte de este gremio, el cónsul de Chile, la asociación de chilenos en Ecuador y el Colegio Alemán, para los damnificados del terremoto.
Juana perdió su casa con el sismo en el sector Los Esteros, tras quedar cuarteada y a los pocos días la demolieron. Ayer recibió la nueva vivienda de manera simbólica, porque en el sector se trabaja en el abastecimiento de red de alcantarillado, que funcionará con un biodigestor y las instalaciones eléctricas, como indicó el alcalde Jorge Zambrano.
Martha Álava es otra damnificada, que del sector Los Esteros pasará a ser parte de los vecinos de este lugar.
Hall expresó que fue una iniciativa del directorio de la cámara que preside empezar un proyecto solidario en beneficio de los afectados ecuatorianos. “Pensábamos que iban a ser por el fenómeno El Niño y resulta que en abril hubo el terremoto, entonces todas las piezas se unieron y era tiempo de hacer algo por los damnificados”.
Señaló que con la cooperación de otras cámaras, como la de Comercio de Guayaquil, Ecuatoriana-Británica, Ecuatoriana-Chilena, se sumaron empresas e instituciones donantes. Entonces se desarrolló un concierto solidario y luego el apoyo del Colegio Alemán fue importante, al conseguir 60 casas.
“Todos fuimos uniendo, aportando y hoy en día estamos felices por esta donación”, manifestó Hall.
Rodrigo Hume, cónsul de Chile, explicó que esto es un acto de solidaridad con la gente; dar una vivienda digna provisoria en Manabí.
Agregó que estas casas se levantan en un espacio de 19,5 metros cuadrados, tienen 2 dormitorios y pueden albergar hasta 8 personas. “Nuestra meta eran 100 casas, y llegamos”, aseguró el diplomático durante la entrega.
Todas las casas fueron adquiridas en Colombia. En las 100 viviendas (20 serán entregadas en Bahía de Caráquez) se hizo una inversión de $ 200.000.
Wendy Castro, comunicadora del Colegio Alemán, de Guayaquil, expresó que las viviendas son de fibrocemento. “La durabilidad es de 10 a 20 años, eso depende del lugar”.
El proyecto ejecutado por el establecimiento se cumplió en fases; se inició con la entrega de insumos de primera necesidad. Se contó con donaciones de padres y, aparte, se organizó una carrera solidaria. “Hubo varias actividades”. (I)