Hortensia Delgado se había acostumbrado a fruncir su cara y tapar su nariz por los malos olores que provenían del cauce del río Burro, que atraviesa el sector de San Pedro, donde habita.  

Contó que fue la tercera persona en poblar el barrio y que llevaba años luchando junto con otros moradores para que se termira la situación de la contaminación en la zona. “Nadie encontraba cuál era el problema”, expresó.

En la actualidad doña Hortensia respira profundo y al exhalar dice que ya no se percibe malos olores. En días pasados, la Empresa Pública Aguas de Manta (EPAM) detectó cuál era el problema por el que las aguas del río Burro en el sector de San Pedro tenían un mal olor y lo solucionó.

Esta semana, personal de la EPAM recorrió el sector para analizar el tema de la remedición ambiental y Hortensia fue una de las personas que estuvo en la caminata junto con los funcionarios.

El director técnico de la empresa, Bolívar Cevallos, indicó que en este sector, junto al puente ubicado frente a la Unidad de Policía Comunitaria, había un rebose de unos 600 metros cúbicos diarios de aguas servidas que salían al río Burro a través de una tubería.

“Esta tubería estaba debajo del muro de gavión, por lo que hubo que romperlo para conectar la tubería al pozo”, refirió. Hortensia agradeció por la deferencia, porque ya no huele mal el lugar.

Los funcionarios de la EPAM avanzaron a distintos puntos donde se ha dado solución.

El gerente de la institución, José Espinoza, dijo que se están interviniendo los cauces de los ríos en la totalidad. En ellos se encontraron cerca de 100 casos de conexiones ilegales de viviendas. Ahora, estas tuberías ya ha sido conectadas al sistema sanitario de la ciudad.  

También se han verificado los trabajos realizados en La Paz, donde se corrigió una línea terciaria que había sido conectada al sistema principal de aguas servidas.

En Miraflores, cerca de la sede de los artesanos, se arregló una rotura del colector.

En el río Muerto hay un canal diseñado para transportar aguas lluvia, el que fue mal usado por mucho tiempo, ya que más bien transportaba aguas servidas de sectores como San Agustín y barrios aledaños. “Para solucionar este tema se construyó un colector paralelo que permite trasladar las aguas desde el pozo hasta el colector principal, ubicado en la avenida Puerto-Aeropuerto. No está en funcionamiento de manera completa”, acotó.

Actualmente, el 30% de aguas servidas ya está siendo transportado por los sistemas sanitarios y estos, a su vez, trasladados a la estación Miraflores. Estos trabajos iniciaron hace un mes.

Una de las primeras intervenciones que se hizo fue a la estación Miraflores. Para repotenciarla se adquirieron 2 bombas con recursos propios, que son las que están funcionando actualmente. A un costado hay una bomba que estaba abandonada. Esta será recuperada. “La limpieza de los lugares cárcamos ya se ejecutó  y estamos esperando instalar la otra bomba que fue adquirida”, dijo.

El correcto funcionamiento de este sistema, explicó Espinoza, permite solucionar los focos externos de contaminación, como los localizados frente a la Federación de Artesanos, sector de Playita Mía, sector de la terminal terrestre y en los cauces de los ríos.

El gerente acotó que, de momento, se ha remediado el problema de contaminación en un 80% en el río Muerto, un 50% en el Burro, y entre 30% y 40% en el Manta.

Andrés Posligua, morador de La Paz, comentó que el hecho de que se haya solucionado los malos olores de su sector evita que existan enfermedades respiratorias.

Antonio Quijije, ciudadano, resaltó que estas acciones ayudan a la comunidad, aunque explicó que en el sector que habita, en Miraflores, los muros de gaviones se están destruyendo, por lo cual sugiere a la autoridad competente que considere esta parte. (I)