Con la finalidad de determinar las condiciones y competencias de la roca, como también la detección de fallas geológicas se realizan explosiones controladas en varios puntos de Portoviejo.

El ejercicio empezó el martes y culminará el sábado, y se ejecuta para medir el comportamiento del suelo ante eventos sísmicos, utilizando el método de refracción.

Las explosiones, entre las 20:00 y 24:00, se provocan con la colocación de 15 kilos de dinamita en un pozo cerrado a 15 metros de profundidad.

Los trabajos no generan ruidos, pero sí se producen vibraciones en un rango de un kilómetro, explica Dalton Andrade, director de Gestión de Riesgos del Municipio de Portoviejo, quien hace un llamado a la ciudadanía para que no se alarme por esta situación.

La primera explosión de prueba se efectuó el pasado martes en la cabecera norte del antiguo aeropuerto Reales Tamarindos. Entre los lugares escogidos para el ejercicio están la Cruz del colegio Cristo Rey, el parque Las Vegas, las canchas del sector Puerto Real, el Fuerte Militar Manabí y la vía Ferroviaria.

El proyecto de microzonificación sísmica lo ejecuta la Empresa Pública EPN-TECH EP con sismógrafos y equipos de la Escuela Politécnica Nacional y darán una idea de la velocidad de las ondas elásticas, transcurrido entre un sitio donde generan las ondas sísmicas y la llegada de estas a diferentes puntos de observación.

Según los resultados, los especialistas darán pautas para tener construcciones más seguras, explicó Michael Schmitz, técnico de la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas.

Andrade indicó que se escogieron puntos donde no hay viviendas para desarrollar las explosiones, con el fin de no causar molestias y preocupación en la ciudadanía.

Estas pruebas corresponden a la segunda fase del proyecto de microzonificación sísmica que realiza el Municipio de Portoviejo con apoyo del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica. (I)