Los barrios  Los Ángeles, Cumandá, Santo Domingo, la ciudadela El Chofer, La Isla, los cercanos a la parroquia Tarqui y algunos del centro del Puyo, se quedaron sin agua por más de 20 horas.  
 “Al menos debieron comunicar para saber qué hacer y prevenir. No tuvimos el líquido para elaborar la comida de nuestra familia”, indicó Martha Medina, habitante del barrio México.

Tania Orna,  gerente de la  Empresa de Agua Potable y Alcantarillado de Pastaza (Emapast),  justificó la suspensión.
Explicó que la restricción se debió a  la ejecución de trabajos emergentes en varias áreas, con la finalidad de garantizar en los días siguientes el normal abastecimiento a los habitantes de Puyo.
El valor de las obras tiene un costo de $7,3 millones.

Entre las labores realizadas por la entidad están  la limpieza de material acumulado en las captaciones de los ríos Pambay, Puyo, Arbolito y las Palmas, y de los afluentes que abastecen  a la planta de tratamiento de La Palestina, la cual provee de agua a la mayor parte de la ciudad.
Además, se realizó  el mantenimiento correctivo emergente en la captación del riachuelo del Arbolito.

En ese lugar, se encontraron fisuras en la estructura de hormigón de la planta. La idea es  evitar que haya fugas por el azud del dique.

Se ejecutó también el mantenimiento correctivo en las dos tuberías  que proveen a los barrios Intipungo, Cumandá y Vicentino.

Del mismo modo, se arregló una tubería de la parte baja  del sitio conocido como La Isla.
La funcionaria mencionó que se hicieron todos los trabajos tendientes a enfrentar el estiaje que se presentó hace pocos días y que comenzó a crear problemas en el abastecimiento normal  a la ciudadanía, sobre todo los que viven en las partes altas.

Orna recordó que está prohibido extraer agua de los hidrantes del sistema de distribución, para luego comercializarla en tanqueros no autorizados.
“De ser encontrada una persona en esa actividad ilícita, se impondrán sanciones con todo el rigor de la ley. Las multas  van desde los 500 y 1.000 dólares”, afirmó.

Los autotanques del Cuerpo de Bomberos Municipal del cantón Pastaza y de la Policía Nacional, son los únicos autorizados para utilizar el agua de los hidrantes.
 Las autoridades intentaron superar la carencia de agua en Puyo con la construcción del proyecto de mejoramiento  denominado Río Blanco.  Este debió entrar en funcionamiento hace  dos años.