El ministerio de educación aprobó la reforma
UEM cambia su nombre tras 40 años de existencia
La fusión de los colegios María Natalia Vaca y Juan Francisco Montalvo de Ambato provocó varios cambios a nivel administrativo y organizacional en el plantel.
Desde su fundación, hace 40 años, las 2 instituciones han venido trabajando en el mismo predio aunque en horarios diferentes y con distintos uniformes.
Tras la unificación, aprobada en septiembre de 2013 por la coordinación zonal 3, el nombre del instituto combinaba ambas denominaciones, siendo llamada de manera temporal ‘Unidad Educativa Mayor María Natalia Vaca - Juan Francisco Montalvo’ (UEM), hasta el 27 de octubre.
En esta fecha el Ministerio de Educación emitió la resolución 406, en la que autoriza el cambio de nombre por el de Mario Cobo Barona, uno de sus 2 fundadores, (Luis Pachano Carrión es el otro creador).
Norma Toro, rectora del plantel, explicó que la modificación responde a un pedido conjunto de quienes conforman la institución. “Vivimos en un mundo evolutivo. En consenso entre docentes y representantes de alumnos y padres, se sugirió el cambio de nombre tomando en cuenta la trayectoria de este ilustre, quien se destacó como un excelente escritor”, dijo.
Toro dijo, además, que si bien la fusión exige una labor aun más ardua de dichas partes, el trabajo de los docentes es clave para completar el proceso de transición.
Un ejemplo de ello es el trabajo de Mónica Altamirano, Oscar Miniguano y Marcelo Olaya, quienes además de su labor educativa diaria, coordinan y dirigen al club de periodismo, compuesto por 45 chicos.
“El grupo de reportería cumple una función muy importante, pues informa semanalmente a toda la institución sobre asuntos como este. Los jóvenes se expresan, conocen, reportean y redactan libremente su opinión sobre este tema que nos compete a todos”, dijo Mónica Altamirano.
La docente, quien cada semana colabora activamente en los talleres de periodismo, explicó que tanto alumnos como padres se muestran a favor de estos cambios. “Mientras más joven sea la persona más fácil le resulta asimilar cambios. Seguramente en el transcurso de este año lectivo los jóvenes habrán asimilado completamente estas modificaciones”, añadió.
Colaboración estudiantil
Santiago Troya, alumno de 2° de bachillerato, es uno de los 45 chicos del grupo de reportería que desde hace 2 meses reciben asesoría comunicacional por parte de 2 periodistas de diario EL TELÉGRAFO.
Durante este tiempo, Santiago se ha destacado como un reportero ágil e investigador innato, razón por la cual ha colaborado con el sondeo de opiniones de sus compañeros, análisis y redacción de al menos el 80% de la presente nota.
Además de esta colaboración, el estudiante pudo expresar su opinión sobre las reformas en el plantel. “Si bien estoy de acuerdo con el cambio de nombre, pues complementa la fusión de los colegios, creo que hace falta mayor socialización del tema por parte de las autoridades”, dijo.
Lo ideal, añadió, es que se dé a conocer al alumnado, por medio de videos, exposiciones y casas abiertas, la trayectoria de Mario Cobo Barona, pues “algunos compañeros aún desconocen la trayectoria y el aporte cultural y literario que este ambateño aportó a nuestra ciudad”.
Él, al igual que otros 44 chicos, asiste cada jueves a los talleres de inducción periodística que se dictan en el auditorio de la institución.
Objetivos de las reformas
La fusión institucional y la reforma del nombre fueron analizadas y aprobadas por el Ministerio de Educación.
Túpac Caluña, director distrital de educación Ambato 2, manifestó que las modificaciones persiguen una finalidad importante.
“Esta indudablemente es la optimización de recursos. La acción fue analizada, revisada y aprobada en el distrito de educación en Tungurahua, pues brinda instrucción a 3.460 alumnos de la zona sur de Ambato y cantones cercanos”, dijo.
Caluña, líder indígena muy reconocido en la región centro y exalumno de la institución, explicó, además, que a diferencia de años anteriores ahora el plantel tiene una sola autoridad y una planta docente. “Esto facilita el direccionamiento de recursos para el mejoramiento del plantel, tanto en infraestructura como en personal administrativo, docente y de servicios”, añadió.
En cuanto al uniforme de los alumnos, Caluña aclaró que las autoridades son las encargadas de decidir si se conserva el uniforme del que fuera el colegio Natalia Vaca, de manera permanente o si se cambia.
A continuación se pueden leer los comentarios de 4 jóvenes del club de periodismo, quienes con total libertad han expresado su opinión sobre este y otros cambios.