La fe a una réplica de la imagen de la Virgen de El Quinche se mantiene intacta por más de 150 años. Y este es otro motivo para visitar el cantón Saquisilí en Cotopaxi.

Según los historiadores locales, la efigie llegó a ese lugar aproximadamente en 1850 y habría sido donada por Telésforo Salazar.

Los comerciantes son los más devotos. Ellos le ofrecen, entre enero y febrero de cada año, diversas celebraciones que con el tiempo se situaron entre las más importantes de esta provincia.

Hace más de medio siglo, la plaza La Concordia, que ahora es el parque Central, recibía a los devotos que, con cantos, oraciones y altares, festejaban su devoción.

“Empezamos pocos, pero es bueno ver cómo la fe en la virgencita crece”, mencionó Elías Oñate, de 67 años, morador del barrio Tambillo. 

Los católicos practicantes del ‘asiento comercial’, como se conoce cariñosamente a Saquisilí, organizan las actividades con meses de antelación y el ‘priostazgo’ cambia año a año, a diferentes organizaciones sociales, familias y barrios.

Los priostes de 2015

Este año el ‘priostazgo’ está a cargo del barrio San Juan Bellavista y más de 30 actividades se prepararon en el calendario oficial de fiestas que inició el 4 de enero con las jochas (invitaciones) a los priostes.

El 10 de enero se unieron otra vez los saquisilenses migrantes y quienes decidieron continuar sus vidas en esta ciudad.

Para Gloria Oñate, que migró a Quito (Pichincha) a los 18 años para estudiar en la Universidad Central del Ecuador, las fiestas en honor a la Virgen de El Quinche son “como volver en el tiempo”.

“Vivo 22 años en la capital, pero cuando regreso a Saquisilí es como si nada hubiera cambiado”, comentó Oñate asombrada.

Uno de los eventos multitudinarios es la denominada Caminata por la Fe y la Vida que organiza el Club Social y Deportivo Octubrinos.

El recorrido empieza en la entrada a la parroquia Pastocalle, sector El Progreso y continúa por Lasso, Río Blanco Bajo de Lasso, Santana, Tanicuchí, hasta llegar al cantón Saquisilí.

Los fieles lo hacen como una ofrenda para la ‘churonita’ por los favores recibidos. Incluso dentro del templo Matriz del cantón, cientos de placas yacen en agradecimiento a quien consideran su madrina y patrona.

El sacerdote, Guido Misse, cuenta que los centenares de vestidos y ajuares de la imagen de la Virgen fueron donados por los fieles, quienes asisten a la novena que se reza antes del gran desfile que se efectuará el 1° de febrero próximo.

Vicente Toapanta, gerente de radio Saquisilí, explica que los organizadores estiman que entre 3 mil y 4 mil personas participan en esa caminata que se caracteriza también por presentar comparsas. Este año habrá 60 y la mayoría está conformada por delegaciones barriales.

“Cada vez hay más visitantes, ahora no solo son los migrantes del cantón, también personas que conocieron de la alegría de la fiestas”, comentó Toapanta.

Además el festejo coincide con la época del carnaval. El alcalde, Juan Alomoto, realizó una invitación para que los turistas arriben con seguridad a ese cantón.