Entrevista / Juan Andagana / gerente general de la cooperativa de ahorro y crédito Kullki wasI
“Rumor de un feriado bancario también afectó al cooperativismo indígena”
Los rumores de un feriado bancario en el país, difundidos ampliamente en redes sociales el mes pasado, provocaron pánico colectivo. Mensajes de un posible cierre de entidades crediticias y el congelamiento de las cuentas de miles de ahorristas empezaron a circular en Facebook y Twitter desde los primeros días de abril, sin que hasta ahora se conozca al responsable de tal acción.
El fatídico recuerdo de la crisis financiera de 1999 volvió a la memoria de los ecuatorianos, quienes desesperados acudieron a las instituciones financieras a retirar sus ahorros y guardarlos en casa.
En Ambato, ciudad considerada el ‘semillero’ del cooperativismo indígena, pues allí nacieron las entidades crediticias dirigidas por personas de comunidades rurales de mayor expansión en el país, el ambiente no fue diferente. Las agencias de cooperativas como Mushuc Runa, Ambato, Chibuleo, Acción Rural, Tarpuk Runa y Kullki Wasi, entre otras, se llenaron de socios que deseaban con urgencia llevarse su dinero.
Según expertos en temas económicos, esto desestabilizó notablemente el sistema cooperativo del Ecuador, y debe ser sancionado.
Uno de ellos es Juan Andagana, gerente de la cooperativa de ahorro y crédito Kullki Wasi, presente en Ambato desde hace 12 años, quien, al igual que otros dirigentes de financieras, considera que el sistema económico nacional goza de buena salud.
En entrevista con diario EL TELÉGRAFO, Andagana explica las razones por las que, a estas alturas, es difícil que se repita un evento como el ‘salvataje’ bancario de 1999; además señala aspectos claves del éxito que ha tenido el cooperativismo indígena tungurahuense en el Ecuador.
¿Qué garantías existen en la actualidad para sustentar el sistema financiero ecuatoriano?
Ante todo hay que considerar que nadie puede predecir el futuro financiero de un país. Si bien en la actualidad el Gobierno aplica un mayor número de programas para prevenir la bancarrota empresarial y tiene más herramientas para fortalecer el sistema crediticio que las que existían en 1999, las cosas pueden cambiar de un momento a otro. Creo que las capacitaciones y asesorías que la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria (SEPS), aplica cada año al sector cooperativo son claves para el crecimiento adecuado de las entidades financieras. De igual forma, la Unidad de Análisis Financiero (UAF) cumple un papel muy importante en el sistema financiero del Ecuador, pues nos enseña, de manera clara, posibles casos de lavado de activos y otras actividades ilícitas. Además contamos con la asesoría del Banco Central del Ecuador, entidad que regula la tasa de interés y del Servicio de Rentas Internas (SRI).
A su criterio, ¿de dónde provienen los rumores de un posible feriado bancario?
Los comentarios malintencionados pueden venir de diferentes sectores. Uno de ellos, a mi parecer, de personas, posiblemente socios, resentidas con el sistema financiero y, me atrevería a decir, enojadas con el Gobierno. Me parece muy responsable la actitud que el presidente de la nación, Rafael Correa, tuvo frente a estos rumores, pues de manera inmediata informó en un enlace ciudadano que la teoría de un feriado bancario no tiene fundamento. La última parte del artículo 308 de la Constitución ecuatoriana prohíbe el congelamiento o la retención arbitraria o generalizada de los fondos o depósitos en las instituciones financieras públicas o privadas.
¿Cuál fue la reacción de los socios de Kullki Wasi tras la difusión de este comentario?
Los ahorristas reaccionaron como seguramente lo hubiéramos hecho usted y yo. Ellos acudieron angustiados a retirar sus ahorros, ante lo cual nunca les negamos el derecho irrevocable de hacer libre uso de sus recursos. A la par, los funcionarios de la cooperativa pidieron a nuestros socios que no se dejaran llevar por rumores, que se informaran y estuvieran pendientes de las noticias de fuentes fiables, pues las verdades a medias muchas veces se convierten en grandes mentiras. Los directivos por nuestra parte enviamos un comunicado a los encargados de las 8 sucursales de la cooperativa, en cantones como Salcedo, Píllaro, Pelileo y Riobamba, entre otros, explicando que el sistema económico de las cooperativas es muy fuerte.
¿Qué parámetros aplica la SEPS para evitar una crisis económica al interior de instituciones como la que usted representa?
El objetivo principal de esta entidad es incrementar la solidez y estabilidad de las organizaciones incluidas en el sector de la economía popular y solidaria. Entre sus más destacables funciones está identificar en cada entidad, en este caso cooperativas de ahorro y crédito, potenciales deficiencias y debilidades en el desarrollo operacional, lo cual podría poner en riesgo la continuidad de sus funciones y el consiguiente perjuicio a los socios. Los funcionarios de la SEPS procesan la información financiera y organizacional de cada financiera y emiten alertas de posibles deficiencias. Además nos capacitan cada año para identificar y evitar delitos financieros muy graves, como el lavado de activos.
¿Se ha identificado al o los responsables del rumor?
Según sé, las autoridades aún investigan para determinar al responsable de tal acción. Al igual que yo, otros líderes de cooperativas indígenas esperamos que se apliquen sanciones, pues se ha jugado con la esperanza y la paz de la gente trabajadora, convulsionando el sector económico y social. Eso no es justo.
Cambiando un poco de tema, ¿cuál es la clave para el éxito que han tenido las cooperativas indígenas de Ambato?
Primero, la fuerte y arraigada cultura de solidaridad y emprendimiento que nuestros ancestros nos legaron. Entidades como AIET, Mushuc Runa, Chibuleo, Ambato y Kullki Wasi, nacieron en esta ciudad en el momento económico más difícil de los últimos 50 años, y no han detenido su expansión en cantones de diferentes provincias cercanas. Otro factor que se debería considerar es que Ambato es la ciudad más comercial de la región, en la que, sin duda, se concentran muchos sectores productivos, como el agrícola, ganadero, textil, del calzado, carrocero y alimenticio, entre otros, y existe buena solvencia.
Hace un mes la entidad a la que representa cumplió 12 años de vida institucional, ¿cuántos socios tiene hoy?
Contamos con más de 60 mil ahorristas en las agencias de Ambato, Píllaro, Latacunga, Quito, Salcedo, Riobamba, Pelileo, Machachi y la parroquia Izamba, al norte de la capital tungurahuense. La expansión ha sido rápida, pues el 7 de abril de 2013, fecha de apertura de la agencia matriz, logramos captar 150 socios, con un cierre financiero de $ 780. Del total de socios actuales, el 89% vive en sectores rurales de las provincias donde estamos presentes. El 11% restante es de varios sectores que en su mayoría se dedican al comercio. (I)