Para gustos y enfoques muy diversos
Alguien parece estar consciente de la condición del pensamiento grafitero, por eso ha escrito: “Pintura eres y en grafiti te convertirás”.
Las alusiones sexuales y el machismo como extroversiones pasadas a las paredes tienen un sinnúmero de frecuencias recogidas por las investigadoras. Podríamos decir que mientras los quiteños piensan en la política, los ambateños miran como distante ese “problema”.
Les urge más el sexo para que digan: “La paja mata al hombre, pero él no teme morir”. En las paredes del cementerio de Ambato se escribió: “De aquí nadie sale vivo”.
En otros barrios han escrito, entre otros textos: “El saber me persigue, pero yo soy más rápido”; “Sácate los lentes para amarnos ciegamente”; “Cristo viene. Acuartélate”; “Ambato, no te duermas en la gloria de los tres juanes”