Muro mantiene discordia en zona de la estación
Envío de oficios, cartas y la realización de reuniones continuas con el Municipio de Ambato no arrojan, hasta el momento, ningún resultado para resolver el tema del muro que separa al Centro Comercial Ferroviario con la calle Colombia y la Universidad Técnica de Ambato.
Según los comerciantes del sector, desde la construcción de este muro en diciembre del año pasado, el porcentaje de sus ventas se ha reducido en un 50%. Esto porque -dicen- antes las personas que venían desde el sector del Mercado de Zapatos Juan Cajas, ubicado en la calle Colombia, solo debían pasar un tramo de 100 metros de las rieles del tren y se conectaban con dicho espacio de comercio. Pero ahora, con la presencia del muro, los clientes no acuden porque esto les representaría una caminata de alrededor de 400 metros, sostuvo Holguer Naranjo, representante de los comerciantes ferroviarios.
Una de las alternativas que los vendedores han planteado es la apertura de una sección del muro para efectuar un paso controlado. “El tren no pasa todos los días y acá ya baja la velocidad. Con guardias sí se podría tener un control del paso de las personas”, sostuvo Naranjo.
Pero, según Jorge Eduardo Carrera, Gerente de Ferrocarriles del Ecuador, esta propuesta no es viable. “El tren maneja altas velocidades y no puede parar a raya. La idea de un paso controlado no existe. Esta es una zona de maniobras y hay equipos delicados”, sostuvo.
El funcionario añadió que en la recuperación del tren en Ambato se invirtieron alrededor de 540 mil dólares para la recuperación de los 1,200 metros cuadrados que contempla la estación, que era utilizada por indigentes y personas que libaban en su interior, tornando el lugar en un espacio peligroso.
“No debemos olvidar que se hizo un inversión importante para recuperar este espacio, que permaneció abandonado y era una zona roja dentro de la ciudad. Lo que buscamos es darle a la población un lugar atractivo y garantizar su seguridad. Por eso se procedió al cierre de la estación”, señaló.
Carrera indicó, además, que lo que sí estarían dispuestos a analizar es la propuesta de pasos elevados o subterráneos, pero -dijo- que esa era una compencia municipal.
Sin embargo, la idea de construir un paso elevado no es bien vista desde la municipalidad, ya que alrededor de 100 metros de longitud, lo que provocaría un alto costo de inversión en su construcción.
Fernando Callejas, Alcalde de la capital tungurahuense, indicó que la alternativa que él ve posible es que los comerciantes del Mercado Ferroviario y la Plaza Juan Cajas se agrupen y formen un fidecomiso para la creación de un gran centro comercial que beneficie a estos dos sectores.
Esta propuesta, según Naranjo, se ha venido manejando desde hace varios años y no ha caído en terreno fertil debido a que serían ellos quienes tendrían que poner el dinero para financiar dicha construcción.
“Esa es una idea que no marca una solución al problema del muro. Ese tema del fidecomiso lo conocemos y hemos señalado que no es viable por el costo que debemos asumir para crear un centro comercial”, manifestó el dirigente.
Es por eso que los comerciantes acudieron a la sesión del Concejo Municipal el pasado martes, para solicitar al Cabildo tungurahuense que se cree una ordenanza que reconozca a los dos mercados como centros de comercio popular y bajo esta ordenanza se reforme el tema de vías y pasos. Insisten en que se abra un acceso en el muro y la circulación por el sector vuelva a ser libre para recuperar el nivel de ventas en sus locales comerciales.