Pese a los esfuerzos que el Municipio de Latacunga realiza en las calles para evitar el comercio informal, un aproximado de mil vendedores ambulantes inundan a diario las cercanías al Centro Comercial Popular El Salto (CCP).

El parque lineal, en la parte baja del mercado, es el sitio preferido por los informales quienes aseguran que “cuentan con el permiso de las autoridades para laborar allí”.

Esta situación, según varios vendedores del CCP, representa una competencia desleal, pues los ambulantes no pagan impuestos, por ello los mercaderes del lugar planean  un acercamiento con el Concejo Cantonal para buscar una solución. El pasado martes los vendedores de El Salto acudieron al Municipio para exponer su problema ante las autoridades, pero no tuvieron éxito, por lo que decidieron asentarse en la av. 5 de Junio, una de las arterias principales de la urbe.

“No es justo que los que no pagan impuestos ni cumplen exigencias administrativas, vendan más que los que sí lo hacemos”, señaló Luis Taco, vendedor formal.

Allí se dieron enfrentamientos verbales entre ambos bandos, siendo necesaria la presencia de la Policía Nacional, que pudo disuadir a los querellantes.  

Días antes, Aníbal Culqui, alcalde, hizo un llamado a los ambulantes para que soliciten la ocupación de los más de 200 puestos disponibles en los distintas mercados.

Los comerciantes de El Salto insistirán a las autoridades para que desaparezca la informalidad.