Machay, el paraíso escondido de las más bellas mariposas del Ecuador
En la comunidad Machay, ubicada a 15 kilómetros del cantón Baños (Tungurahua), se ubica un mariposario de 100 m2, adecuado con plantas autóctonas que albergan a ese tipo de insectos.
Una vez dentro, la primera especie que se observa se llama Satiridae. Está presente en todo el Ecuador, pero en cada región cambia su aspecto. Protegidas por unas cajas - albergues, diseñadas especialmente para cuidar los huevos, larvas y capullos de la especie, comen y reposan tranquilas mientras son observadas por los visitantes.
Otras especies que se pueden apreciar son Pieridae, Colias, Papilionidae, Perisama, Lincanidae, Catastitas entre otras. Este lugar fue creado por Ismael Aldas Villafuerte, baneño quien inició sus trabajos de investigación de las mariposas autóctonas del Ecuador por iniciativa de un entomólogo inglés.
Ismael es guía investigativo y en la actualidad conoce casi como nadie las diferentes especies y clasificación de mariposas que habitan Tungurahua y todo el Ecuador. Gracias a su trabajo existen dos clases de mariposas que llevan su nombre y su apellido: Perisama Ismaeli y Perisama Aldasi.
Y otra mariposa denominada Insigno Casnia Taisae, que significa “única en el género” en latín, fue llamada así en honor a su hija Tais.
La forma entretejida de las plantas huésped y los vivos colores de las flores que nacen de ellas, brindan un ambiente ideal para la convivencia de diferentes especies. Sumado a eso, el plástico que recubre el domo inhibe el paso del frío y del viento lo que brinda la temperatura perfecta, que no baja de 20% para garantizar la vida de la mariposa.
Anteriormente, el mariposario estaba ubicado en Río Negro, pero desde hace dos años, se decidió reubicarlo en Machay. Según explica Ismael, cada 500 metros del piso climático de nuestro país existe una especie de mariposa diferente.
“La familia Satiridae se puede encontrar en todas las regiones del país con sus diferentes climas, tanto en páramo como a nivel del mar. A pesar de esto, su dieta se mantiene sin variedad. Por poner un ejemplo: esta mariposa se alimenta de bambú en la Costa; en el páramo se alimenta de suru, que es un bambú, pero de las regiones altas”.
La entrada cuesta 50 centavos y es una excelente forma de aprender y divertirse a la vez. La visita es guiada y asesorada por Ismael, quien enseña y aconseja a los más pequeños a entender que una mariposa no es solo un lepidóptero hermoso, sino que al igual que otros insectos, ayuda a la naturaleza en el proceso de polinización.
Mariona Martini, turista italiana, manifiestó que en su país, el único lugar donde se puede apreciar mariposas de gran tamaño es en Diano Marino, poblado costero con presencia de estos insectos. “Los colores tan vivos que tienen estas mariposas no se igualan a las que tenemos en Europa. Es muy hermoso este lugar, aunque creo que debería ser más grande, para que más personas disfruten de esta hermosa exposición, sobre todo los niños”.
Cada género tiene de 20 a 30 especies, dependiendo de las variaciones climáticas y están clasificadas en diurnas y nocturnas.
Ismael enfatiza en la conservación del medio ambiente, mediante charlas que brinda en la visita al mariposario. “Deberíamos tomar más conciencia en la conservación del medio ambiente. Cuando destruimos la naturaleza y zonas protegidas, estamos sentenciando de muerte no solo a mariposas y otros insectos, sino a una gran cantidad de aves y animales circundantes. Invitamos a todos a visitar el mariposario para aprender a conservar la vida de estos hermosos y útiles insectos de la naturaleza”, dijo.